sábado, 29 de diciembre de 2007

¿Intelectuales?

Los intelectuales empoderados han tenido la capacidad de que sus ideas transiten del socialismo, comunismo, anarquismo o guerrilla al sistema de partidos. Se han vuelto transparentólogos o especialistas en rendición de cuentas...

No son pocos los elementos que nos permiten advertir que en México se ha venido gestando una simbiosis entre los hombres del dinero y los autonombrados intelectuales. Cada vez son más los mecanismos que igualan a estos pequeños conglomerados de mexicanos.

Hace una semana un grupo de "intelectuales" promovió un amparo en contra de las reformas que prohíben a particulares la contratación de spots con fines políticos. Una semana después, el amparo ha sido rechazado por notoriamente improcedente. Esta acción ya había sido interpuesta por los hombres del dinero (autonombrados empresarios) y había tenido la misma suerte.

La preocupación de los hombres del poder económico es la misma de quienes se supone ejercen el poder ideológico. Ambos grupos piensan que si un particular no puede contratar spots, su libertad de expresión está en riesgo. Han recurrido al amparo porque consideran vulneradas sus garantías individuales.

Lo que llama la atención es que estos segmentos no se han pronunciado sobre la violación a la libertad de tránsito que ocasionan los operativos militares. Por el contrario, los hombres del poder (principalmente económico), han aplaudido a rabiar estas acciones, y los intelectuales las han justificado o se han hecho "ojo de hormiga".

En el caso de Jalisco, las autoridades declaran que los retenes (violatorios de la Constitución) se aplican porque así lo solicitan los organismos empresariales. Estas acciones pretenden encontrar justificación en ofrecer condiciones de seguridad. La deducción es que "el fin justifica los medios". Se puede violar la Constitución a cambio de ofrecer seguridad a los ciudadanos. El problema se vuelve mayor cuando vemos que ni con retenes tenemos seguridad, y adquiere signos de alarma cuando a los intelectuales se los traga la tierra para hacer una denuncia acorde con la gravedad de estas situaciones.

Hablemos brevemente de otras garantías individuales que protege nuestra Carta Magna, por ejemplo, la garantía de igualdad. En este tipo de garantías encontramos la prohibición de la esclavitud y la igualdad de derechos sin distinción de sexo. En México existe la esclavitud en la actualidad y la igualdad de sexos es, en muchos casos, letra muerta. Se entiende que los hombres del poder económico (que se han venido haciendo del poder político) no se pronuncien al respecto, en razón de que muchos de ellos son cómplices de la vulneración de estas garantías. Lo que no se entiende es el silencio de los intelectuales en este tipo de temas, tan sensibles como elementales.

Pero las coincidencias en los pronunciamientos, silencios y estrategias no es lo único que ha venido mimetizando al intelectual con el hombre del dinero; también los ha venido acercando el reparto de cuotas en organismos constitucionales autónomos, como el IFE.

La semana pasada documenté una serie de coincidencias entre los integrantes originales del actual Consejo General del IFE, que pareciera fueron reclutados en una misma institución bancaria privada, y comenté la cuota que también tienen los hombres del dinero en la consejera Alejandra Latapí, quien además tiene un muy cercano e íntimo nexo con un ex director general del mismo banco referido la semana anterior.

Los intelectuales no han venido operando de forma muy diferente. Hoy las vacas sagradas impulsan a los que fueron sus "asesores" (así pomposamente llamados), que en realidad, y en el mejor de los casos, fueron asistentes recién desempacados de sus estudios de posgrado.

Los intelectuales empoderados han tenido la capacidad de que sus ideas transiten del socialismo, comunismo, anarquismo o guerrilla al sistema de partidos, y cuando lo han alcanzado todo tienen además la capacidad de volverse transparentólogos o especialistas en rendición de cuentas... por lo pronto; mañana ya verán qué más sale. Lo que sea será aceptable por conservar los sueldos, que curiosamente en todos esos lugares son de privilegio.

La palabra intelectual, según Laura Blanca Olamendi en "Léxico de la Política", "identifica en la edad moderna a un individuo con capacidad crítica o de antagonismo en relación con cualquier tipo de poder".

Muchos de nuestros autonombrados intelectuales en realidad no lo son, pues les hace falta la capacidad crítica para con el poder económico y con el clerical, por solamente mencionar dos de los que actualmente reparten las cartas. De ser antagónicos con este tipo de poder, mejor ni hablemos; sucede exactamente lo contrario: cada vez se mimetizan más.

La propia Olamendi nos ofrece en la misma obra un pasaje histórico que hoy se reedita: "A mediados del siglo XIX, los intelectuales se dividen entre los que reclaman la libertad y entre aquellos viejos protagonistas de la derecha francesa, representantes de una cultura que hacía suya la tesis de que el verdadero intelectual debe saber subordinar la razón y la verdad a los intereses del Estado".

Esperemos que en esta reedición empiecen a surgir los nuevos valores del primero de los bandos, para que pongan el dedo en la llaga de las cuestiones graves y urgentes, para que llamen la atención de la sociedad y la comunidad internacional, y como buenos intelectuales sean antagónicos y críticos a todos los tipos de poder. Los del segundo de los bandos, ya están muy vistos, son predecibles y no aportan algo nuevo, solo hacen bola como corifeos del poder.

¡Que pase muy Feliz Año Nuevo!

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 22 de diciembre de 2007

IFE: ¿partidizado o privatizado?

Nos han explicado que los partidos actúan por medio de sus diputados para designar a consejeros electorales a modo. Todo suena contundente e irrefutable... pero, más allá de estos lugares comunes, vale la pena analizar algunos elementos que son tan reveladores como preocupantes.

No pocos analistas han dejado de hacer su tarea en serio y se han quedado en la comodidad de la superficie. Los partidos han asumido, hasta con descaro, que sí tienen cuotas en este tipo de organismos... pero en realidad no las tienen y lo presumen por ostentar un poder que en verdad no ejercen pues lo han cedido en favor de factores reales de poder. Si bien los partidos se han ganado a pulso el repudio social, no atinamos al creer que éste sea el verdadero motivo. En realidad debería repudiarse a los partidos por conceder cuotas, más que por tenerlas. Si mantener cuotas es de plano reprobable, otorgarlas es mucho más grave.

Decir que los partidos designan a los consejeros suena convincente, pero la afirmación descuida una serie de cuestiones elementales que deben considerarse. La primera es que no es lo mismo un partido que el grupo parlamentario de éste. Más cercano a la realidad es el hecho de que el grupo parlamentario es quien designa, y aún más, que sólo un puñado de cada grupo tiene verdadera injerencia en la propuesta o en la toma de decisiones. Pudiera parecer una mera cuestión de formas, pero no lo es. Las decisiones de los grupos parlamentarios tienen una dinámica propia: los incentivos y cabildeos de esta arena pueden permitir a un legislador hacer acopio de apoyos y diversos tipos de capital para catapultarse a una Gubernatura, aun sin el respaldo de su instituto político.

Para atender cuestiones elementales, me referiré solamente a una de ellas: el factor de entes privados en la conformación original del actual Consejo General del IFE. Y, por limitaciones de espacio, sólo esbozaré algunas referencias.

Empecemos por el flamante consejero presidente provisional. Según la página web del IFE, Andrés Albo Márquez, "hasta octubre del 2003 fue Director del Departamento de Estudios Sociopolíticos de Banamex. Ingresó a ese departamento en 1989". En la columna "Tiempo de Negocios", de Darío Celis, del 12 de junio de 2001, publicada por Grupo Reforma, se daba cuenta de lo siguiente: "Banamex, que comandan Roberto Hernández y Alfredo Harp, se apresta a realizar un profundo ejercicio de cabildeo para convencer a los legisladores que la institución no se benefició del Fobaproa y que la fusión con Citigroup es benéfica. El banco que dirige Manuel Medina Mora acaba de designar a Jorge Hierro y Andrés Albo como los principales operadores del lobbing. Vaya prueba para ambos. El primero es director general adjunto y el segundo director de Estudios Políticos". Sí, Medina Mora, el mismo que actualmente dirige la PGR.

Ahora vayamos con el presidente saliente del IFE. Luis Carlos Ugalde fue cercano colaborador de Jesús Reyes Heroles, actual director de PEMEX. Una extraña coincidencia es que el hijo de la leyenda priista, según el currículum publicado en la página web de la Presidencia, "ha sido miembro de los consejos de administración de Banamex Citigroup y de Wal-Mart México". Otro de los datos curiosos que arroja este currículum es que el director de PEMEX fue "presidente del Consejo y Director General de GEA Grupo de Economistas y Asociados, empresa de consultoría que él co-fundó". GEA-ISA fue la primera empresa encuestadora que dio por ganador en sus estudios a Calderón... cuando el resto tardó meses en siquiera registrar un empate. Quizás porque su director es muy intuitivo, fue designado por Calderón como director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN).

Uno de los nombres que en 2003 se manejó con fuerza, junto con el de Luis Carlos Ugalde y Alfonso Zárate, para ocupar la presidencia del IFE, fue el de Roberto del Cueto Legaspi. Con una impresionante trayectoria en el ámbito bancario, Del Cueto fue Director General Adjunto y Director General de... Banamex. El destino tenía decidido para Del Cueto su inclusión en un organismo constitucional autónomo; no fue presidente del IFE, pero recientemente fue propuesto por el titular del Ejecutivo y nombrado subgobernador del Banco de México e integrante de la junta de gobierno de ese organismo.

Al parecer, algunas entidades privadas se han convertido en toda una cantera de nuevos valores y talentos de la política. No se preocupe, da lo mismo manejar un banco que la PGR: estos nuevos y verdaderos héroes tienen la capacidad para atender con criterios privados las cuestiones bancarias para inmediatamente desenchufarse y conectarse con la lógica, la mística y los valores del ámbito público. Lo malo de los oligopolios es que también concentran el talento y luego hay que andarles pirateando su personal para que se sacrifique por la Patria.

Otro caso, el de Alejandra Latapí, actual consejera del IFE. El currículum que publica dice: "Antes de ser designada consejera, se desempeñó como enlace político del Consejo Coordinador Empresarial con la H. Cámara de Diputados (2000-2003)". ¡Otra coincidencia! La misma organización corporativista que se dio vuelo con la propaganda negra, infundiendo miedo, odio, fomentando la polarización; la misma que se ha inconformado y que recientemente se amparó en contra de las reformas electorales; la misma organización que denuncia con especial enjundia la partidización del IFE.

Latapí, quien con su voto hizo la diferencia (votación 5 vs. 4) apoyando los spots de propaganda negra. La consejera con nulos antecedentes en materia electoral, y el prototipo de lo que es una cuota, pero en este caso no del PAN, PRI o PRD, sino del CCE.

Los elementos expuestos son por lo menos suficientes para apuntar en la dirección de cuestionarnos si el IFE está partidizado o si en realidad está privatizado.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 15 de diciembre de 2007

Fusibles

"Fusible" es un término que no solamente se utiliza en cuestiones eléctricas. En Francia es comúnmente utilizado para referirse a los Ministros, incluido el Primer Ministro. Al igual que los fusibles eléctricos, la función de los fusibles políticos es proteger un aparato o una instalación.

Ante una descarga o inestabilidad del suministro eléctrico, el fusible se funde; esa es su función, evitar un daño mayor. En política sería igual: los fusibles son los funcionarios que renuncian para evitar un daño mayor al aparato gubernamental o al sistema político.

En México hemos llegado a tal punto que hasta este tipo de cuestiones elementales se han perdido. Aquí los fusibles se han vuelto inmunes al sobrecalentamiento de la corriente política. De pronto pareciera que la presión social y el ejercicio periodístico los pone al rojo vivo y que están a punto de fundirse, pero una vez que la intensidad de la carga baja, vuelven a su temperatura normal y, lejos de debilitarse, pareciera que los cambios de temperatura los van templando.

Si usted tiene duda de lo anterior, basta con voltear a Tonalá. En cualquier otra parte del mundo occidental, un funcionario con ese tipo de señalamientos ya no estaría despachando, y mucho menos rindiendo sonriente su Informe de Gobierno. Otro caso similar es el del "Góber Precioso", quien después de la memorable actuación de la Corte ha pasado de ser el héroe de la película de Kamel Nacif a ser héroe de mil batallas.

Otra causa por la que los fusibles han dejado de serlo es porque los titulares de los Poderes Ejecutivos han decidido prescindir de ellos. En aras de la popularidad, el Presidente y los Gobernadores se quieren aventar todos los trompos a la uña, solitos y sin ayuda. Entre mayor cantidad de apariciones en los medios, mejor; no importa si eso lleva al riesgo de tomar los cables de alta tensión de manera directa.

Al parecer, lo que se les olvida a nuestros políticos es que con el cese de una persona, más allá del daño al funcionario -que al parecer se quiere evitar a toda costa- está evitándose un daño al andamiaje institucional y se está defendiendo la credibilidad de las instituciones. Pero hoy en día nadie quiere ser fusible. Al no querer serlo, son los propios funcionarios quienes ponen en riesgo las instituciones, al igual que usted o yo pondríamos en riesgo una PC o un televisor si no usamos regulador.

Puedo imaginar que alguien no utilice fusibles o reguladores en algunos casos: cuando el aparato es lo suficientemente viejo o disfuncional como para que deje de ser importante si se llega o no a estropear; igual ocurre si no se aprecia el costo del aparato o no se tiene idea de lo que puede llegar a costar sustituirlo; o de plano si a alguien le gusta correr riesgos innecesarios, aunque también podría tratarse de la mezcla de dos o más de estos factores.

Los políticos han renunciado voluntariamente a ser fusibles, y lo han hecho porque han renunciado a ser políticos. Han optado por ser burócratas: cobran el Día del Servidor Público, demandan y se amparan si son despedidos, entre otras situaciones que solamente tienen aplicación para un burócrata, no para un político. Mucho se criticó el régimen político del México autoritario, pero estas distorsiones y perversiones han alcanzado un grado de estridencia tal, que obligan a cuestionarse con seriedad si se trata de mejores prácticas a las del pasado condenable.

La explicación a este fenómeno podría ser la siguiente: los políticos han sido sustituidos por burócratas; al no haber políticos, no hay fusibles para el andamiaje institucional, mismo que está recibiendo las descargas y variables de energía que lo tienen colapsado.

Pero... ¿entonces, a quiénes está sirviendo la clase dirigente que se encuentra al frente de las instituciones? Estaría sirviendo a los factores reales de poder. En esos ámbitos, el negocio siempre está floreciente: se expiden permisos, se cambian usos de suelo, se entregan donativos gubernamentales, se barbea, se permiten actos ilícitos a los ojos de todos y a plena luz del día.

Para esos intereses, los actuales dirigentes sí están sirviendo de fusible. Los que se queman son los funcionarios, sobre ellos cae el descrédito y los señalamientos, todo esto a cambio de una minipropina (considerando el monto de los negocios). Los que obtienen la verdadera ganancia, sirviéndose de la truculencia gubernamental, son señorones, y son tratados como tales. Total, las ganancias obtenidas les permitirán seguir financiando a un creciente lumpen político dispuesto a todo. Entre más crezca ese lumpen, menor será el costo de conseguir sus servicios.

A diferencia de la política, donde se requieren ciertas habilidades y valores para ejercerla, desde el mundo de los negocios se puede financiar la campaña de un precandidato y de un candidato, y entonces se fabricará un "político". A diferencia del andamiaje institucional político, donde hay que cambiar los fusibles para que evitar daños mayores, en el aparato de los negocios no hace falta cambiar los fusibles, hay que dejarlos hasta el fin de su ejercicio... para que rindan.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 8 de diciembre de 2007

Paladines de la libertad

Extraña visión la de los dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), quienes esta semana interpusieron un amparo en contra de la reforma constitucional que prohíbe la contratación de spots en materia electoral por parte de organismos privados. Argumentan la violación de garantías individuales, como la libertad de expresión, derecho a la información y asociación.

Más tardaron en anunciar y presentar el recurso jurídico, que éste en ser rechazado por el juez. El CCE ha anunciado, otra vez con bombo y platillo, que continuará con su defensa patriótica de las garantías y libertades y que acudirán a una instancia superior para que decida al respecto.

No son pocos los elementos que llaman la atención en este episodio. Primeramente, veamos la realidad de varios países desarrollados en donde este tipo de anuncios están prohibidos y nunca se ha tenido conocimiento de queja alguna o recurso jurídico que pretenda combatir la medida. En esos países no se advierte atentado a las garantías o limitación de libertades relacionadas con la prohibición de contratar spots político-electorales.

La realidad de un país desarrollado puede explicar con claridad las razones de que no les importe si se programan o no spots políticos: un elevado nivel de lectura, menos horas frente al televisor, nutrida oferta de pasatiempos y actividades culturales, mayor participación de la población en actividades deportivas, mayor politización, una robusta clase media que amortigua los vaivenes entre los extremos políticos, un avanzado sistema de prestaciones sociales, entre muchas otras. Todos estos factores suponen el ejercicio real de libertades.

Por eso resulta kafkiano ver a los dirigentes (habría que ver qué tanto lo son) empresariales (nuevamente habría que verificar la pertinencia del término), rasgándose las vestiduras ante semejante atentado a las garantías y libertades, generado por no poder programar sus anuncios. Todavía llama más la atención su silencio cómplice frente al no cumplimiento de "las otras" garantías individuales en México, aquellas que estos empresarios se niegan a ver y reconocer: la garantía a un trabajo digno y bien remunerado, recreación, vivienda, educación, etcétera.

Lo que es más, en algunos casos, como es la garantía de igualdad de género, de ecuación laica o la de decidir libremente el número y espaciamiento de los hijos, estos grupos se han manifestado abiertamente en contra, ya sea en su discurso o con acciones concretas.

No hablemos de los derechos de tercera generación; los dirigentes empresariales no saben ni con qué se comen. El derecho por un medio ambiente sano, no contaminado, es vulnerado por no pocos empresarios que no pagan el costo ambiental de su actividad. Imaginemos, por un momento, lo siguiente: en México todas las empresas pagan equipos de reducción de emisiones, tratan sus aguas y pagan un costo por impacto ambiental... ¿Cuánto disminuirán las ganancias que hoy perciben los preocupados hombres de negocios? ¿Cuánto disminuiría nuestra competitividad, sustentada básicamente en bajos precios, que tienen origen en que estos demócratas cargan muchos costos al medio ambiente?

El segundo elemento que llama la atención es que estos organismos, que parecieran preocuparse tanto por la situación democrática de nuestro país, son precisamente el ejemplo de la antidemocracia. En ellos la opacidad de las decisiones campea, las elecciones de sus (supuestos) dirigentes se deciden en corto, en comilonas, o se juegan en un volado. En no pocas ocasiones los pretendidos dirigentes son en realidad gerentes que prestan nombre y figura. No hay quién pueda explicar en qué consisten los mecanismos democráticos de un organismo empresarial, por la sencilla razón de que no existen: desde la elección de dirigentes, hasta la toma de postura frente a un tema de coyuntura.

Por último, nos enfrentamos a un problema de magnificación y de concepción. En México ha llegado a tal punto la veneración del Dios Mercado que sus apologistas hacen aparecer a Adam Smith como un comunista. Adicionalmente, consideramos que todo está o debe estar en el mercado. Por eso los señores empresarios creen que la libertad se puede comprar. Si la libertad de expresión se ejerce comprando un anuncio, entonces más del 95 por ciento de los mexicanos está condenado a nunca poderla ejercer.

Los "dirigentes empresariales" parten del entendido de que la política es un negocio. Lo que se les olvida es que la política debe ser pública y por lo tanto no se encuentra o no debe situarse en el mercado (el del dinero).

Si los señores empresarios quieren abonar por un ejercicio más pleno de las libertades en México, no son pocas las acciones que pueden poner en práctica de manera inmediata. Tienen que ver con la democratización de sus anquilosadas y premodernas organizaciones, el trato a sus empleados, al medio ambiente y a sus consumidores, el cumplimiento de sus obligaciones fiscales, el no confundir caridad y altruismo con deducción fiscal, el otorgamiento pleno de prestaciones de seguridad social, etcétera.

Cuando esto suceda, el ejercicio de las libertades será más pleno... y no sólo para quienes puedan pagarlas.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 1 de diciembre de 2007

La UdeG y el periodismo

No es reciente la preocupación y el sano interés de la Universidad de Guadalajara por el periodismo. Para muestra, el importante papel que ha tenido en la creación del Premio Jalisco de Periodismo (antes Emisario), el apoyo y contribución en el nacimiento y operación de la versión ciudadana del Premio Nacional de Periodismo y la creación del Premio Nacional de Periodismo Cultural Fernando Benítez que se entrega en el marco de la Feria Internacional del Libro. No obstante lo anterior, hasta hace poco la UdeG saldó la ausencia de una carrera de periodismo.

Precisamente en la FIL se desarrollan (del viernes al domingo) los trabajos del Tercer Encuentro Internacional de Periodismo, organizado por la UdeG y el Internacional Center for Journalists (ICFJ) con sede en Washington, D.C, y que cuenta con el apoyo del Consulado de Estados Unidos en Guadalajara y las autoridades municipales de Guadalajara y Zapopan.

Esta iniciativa tuvo su origen en 2005, como una apuesta del Centro Universitario de la Ciénega para fortalecer la naciente carrera de periodismo y para contribuir a la formación y actualización de los profesionales de esta importante actividad. En 2005, el tema central del encuentro fue la Ética. En 2006, el tema central fue Periodismo Responsable. Son muchos los nombres de los expositores que han acudido al encuentro. El compromiso del CuCiénega ha sido refrendado año con año y a este esfuerzo se han venido sumando otras dependencias y entidades.

En su versión 2007, se aborda el Periodismo Digital: Las nuevas formas del periodismo. La lista de expositores es tan larga como sólida la trayectoria de los participantes: Guillermo Camacho y Juan Carlos Garda, de MURAL; Ramón Alberto Garza, de Proyecto Índigo; Tom Kennedy, del Washington Post; Neil Budde, de Yahoo; David Beard, de Boston.com; Ammy Webb, de Webb Media; Beth Belton, de AP; Juana Libedinsky, del diario argentino La Nación; Soledad Jarquín (Premio Nacional de Periodismo), de CIMAC; Alma Rosa Alva de la Selva, de la UNAM; Nathalie Applewhite, del Pullitzer Center; el Maestro Javier Darío Restrepo y Renata Cabrales, de Colombia; Wael Abbas, de Egipto; Luis Botello, Sharon Moshavi, Patrick Butler y Ana Arana, del ICFJ; Jean Francois Fogel, de Le Monde; Ingrid Bejerman, de Canadá; Craig Duff, del New York Times; Dan Grech, de Marketplace Radio; Doug Mitchell, de Nacional Public Radio; Eugenio Godard, de IBM; Douglas Harbretch, de New Media; Eduardo Hauser, de Daylime.com; Gabriel Sosa Plata, de la UAM; José Buendía, de PRENDE; Gabriela Warkentin, de la Universidad Iberoamericana; Marco Levario, de Etcétera; Stephen Franklin, de Chicago Tribune; Adam Glenn, de ABC.com; José Luis Orihuela, Universidad de Navarra... y la lista continúa (www.medios.udg.mx/eiperiodistas).

Estos especialistas abordan el futuro de los medios y el reto de la credibilidad en las nuevas tecnologías; explican cómo ha venido configurándose la sala de redacción multimedia y cómo ha surgido la nueva mesa de asignaciones digital; la censura y libertad de expresión en los nuevos medios; el papel de éstos en la cobertura de guerra y de elecciones; la integración de los medios en la vida social interactiva; las nuevas tecnologías y las formas de hacer multimedia; los nuevos medios como empresa y negocio; las nuevas formas de hacer periodismo con otras tecnologías; y se cuestionan si a partir de los blogs, las cámaras en los teléfonos móviles y herramientas como MySpace y Facebook, todos nos convertimos en periodistas.

La calidad de este encuentro lo ha posicionado como una importante actividad, de las muchas que se desarrollan en la FIL, pero la expectativa es aún mejor. El día de hoy será lanzado por el Rector General de la UdeG y las más altas autoridades del ICFJ, el Centro Internacional de Periodismo Digital. Será único en su tipo y contará con una oferta académica presencial y a distancia, dirigida a toda Latinoamérica y a los hispanohablantes de la Unión Americana.

Al esfuerzo de la UdeG y del ICFJ se ha sumado la Fundación Knight. El prestigio del ICFJ, la experiencia de haber instalado recientemente (también en alianza con una universidad) un centro de características similares en China, el compromiso de la UdeG por apostar a fortalecer el periodismo y el interés de empresas internacionales por patrocinar este proyecto, son motivos suficientes para contar con buenas expectativas.

La UdeG no fue la única institución que se acercó al ICFJ para realizar este proyecto, pero se decidió por nuestra máxima casa de estudios al tomar en cuenta su compromiso con la transparencia y con el periodismo.

Muestra de ese compromiso con el periodismo y con un ejercicio responsable del uso de los medios públicos, en el marco del Seminario de Autorregulación de Medios de Servicio Público, la semana pasada, el Rector anunció la instalación del Consejo Consultivo de la Dirección General de Medios, la instalación de los Comités Técnicos de las siete radiodifusoras de la universidad y la creación de la figura del ombudsman del televidente y del radioescucha de los programas que produce o transmite la UdeG. Estas acciones, así como la reciente elaboración del Manual de Estilo y Código de Ética para los medios de la universidad, contribuirán a un ejercicio más transparente y responsable de esta función social.

La creación de la Carrera de Periodismo, la consolidación del encuentro internacional de periodismo, la próxima apertura del centro de periodismo digital y las medidas de autorregulación que se diseñan, sin duda vendrán a fortalecer el periodismo en Jalisco y en México.

sábado, 24 de noviembre de 2007

Desigualdad y democracia

Esta semana nuestra ciudad fue sede del 19 Congreso Nacional y Segundo Congreso Internacional de Estudios Electorales. Este esfuerzo, encabezado por la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales, en esta ocasión contó, principalmente, con el apoyo de la Universidad de Guadalajara y del Instituto Electoral del Estado de Jalisco.

Los trabajos ahí expuestos son desarrollados por académicos, investigadores, consejeros electorales y periodistas, entre otros, y para ser presentados deben contar con un mínimo rigor académico. Se presentaron decenas de ponencias, y no pocas reflejan el colapso de nuestro sistema democrático.

No son pocos los avances que en esta materia reporta nuestro país en los últimos 15 años. Sin embargo, en el mismo periodo los vicios del pasado han sufrido una metamorfosis y ahora aparecen más sólidos, más institucionalizados. Por si lo anterior fuera poco, han aparecido nuevas prácticas que hacen palidecer los logros alcanzados.

Para decirlo en otros términos, la medicina desarrollada para combatir las enfermedades de un Estado autoritario ha quedado obsoleta: los virus y bacterias mutaron y se han vuelto inmunes a los medicamentos desarrollados. Además han aparecido nuevas enfermedades y aún no iniciamos los trabajos para desarrollar nuevos medicamentos; lo que es más, no nos hemos dado tiempo para contar con un diagnóstico certero.

Estos y otros aspectos quedaron en evidencia en el "encuentro con medios" que se desarrolló en el marco de los trabajos del congreso. Las preguntas de los representantes de los medios de comunicación a los especialistas, autoridades y personalidades ahí presentes se pueden traducir con la expresión angustiante de un paciente: ¿qué tengo, doctor?

Una de las respuestas ofrecidas es particularmente valiosa: hemos desarrollado mecanismos democráticos electorales y nos olvidamos de lo demás. Nos centramos en una democracia instrumental (limitada) y hemos dejado de atender el fin al que debe servir.

Paralelamente al desarrollo de este congreso, en la Ciudad de México el representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Diego Antoní, advertía que la desigualdad económica es una seria amenaza contra la democracia en América Latina. Aquí tenemos un punto estratégico que explica el estancamiento de los avances democráticos procedimentales que se habían venido desarrollando.

Si a lo anterior agregamos el hecho de que México es un referente en materia de desigualdad económica (que no es necesariamente lo mismo que pobreza), tenemos como consecuencia que en nuestro caso particular la amenaza se torna aún más grave. Desigualdad regional y desigualdad de ingreso entre el 10 por ciento que se encuentra en ambos extremos: los más ricos y los más pobres. Esta es una realidad innegable y dramática que caracteriza a nuestro país.

Por eso no hay regulación que alcance; por eso suena impensable que el IFE y los organismos electorales locales sean capaces de fiscalizar los gastos realizados por los partidos. En un país caracterizado además por su elevada evasión y defraudación fiscal, donde la autoridad hacendaria ha sido incapaz de combatir estas prácticas, no se puede pensar que la autoridad electoral pueda detener las trampas, chanchullos y marrullerías en que incurren los partidos en el ejercicio de su gasto. Para pensar que una auténtica fiscalización sea posible es imprescindible que avancemos en nuestro sistema fiscalizador, pues la consecuencia sería una mayor tributación, un mayor gasto social y una menor desigualdad.

Recordemos que nuestro país recauda menos del 10 por ciento de impuestos con relación al PIB, muy por debajo de Argentina, Chile y Brasil, que rondan el 20 por ciento; y de la Unión Europea, que recauda el 30. No hace poco, el FMI señaló que el régimen fiscal prevaleciente en México favorece a los mexicanos más acomodados. Se cierra así el círculo de la desigualdad.

En este escenario no es extraño que los pocos mexicanos en la cúspide de la pirámide de ingresos sean quienes se hayan adueñado de los partidos políticos. Si seguimos la ruta del dinero encontraremos a los que pueden financiar campañas y precampañas u ofrecer apoyos en estudios o en especie; los que pueden pagar cabilderos para empujar, matizar o detener reformas estructurales.

Algunos pensarán que lo mismo pasa en otros países. Tienen razón. La diferencia, sin embargo, radica en el nivel de desigualdad. En una sociedad como la estadounidense, con una robusta clase media, que tiene acceso a crédito sustancialmente más barato y no sólo para vivienda, con modelos de gerencia pública local más o menos eficientes y con una situación de vida resuelta en lo básico, incluyendo la expectativa de futuro, lo que hagan los de arriba les impactará en menor medida: los niveles de desigualdad en la Unión Americana entre el que gana menos y el que gana más son muy inferiores a los de México.

Cuando la desigualdad campea, las oportunidades se reducen, y si en una elección se juega todo, los jóvenes precandidatos ven el "ahora o nunca". Cuando la desigualdad se ha impuesto, ya ha herido la dignidad de muchos y devaluado la de otros tantos.Para retomar el camino a la democracia es necesario rescatar la dignidad y combatir en serio la desigualdad. Lo demás es demagogia.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 17 de noviembre de 2007

¡Ya era hora!

"Cualquier camino es bueno para el que no sabe a dónde ir". Este sabio refrán nos indica la necesidad de tener rumbo. De ahí la importancia del convenio que se firmó el miércoles, con el que se pretende catapultar a Jalisco en materia de competitividad. ¡Ya era hora! El acuerdo lo suscribieron el Gobierno del Estado, Presidentes Municipales, empresarios, universidades, sindicatos, organismos no gubernamentales e integrantes de la sociedad.

El objetivo es mejorar la competitividad del Estado, y surge del reconocimiento de que nos encontramos en el nada honroso lugar 16 de las 32 entidades de la República.

Lo anterior implica un gran mérito de las autoridades estatales y de todos los que intervinieron en la formalización de este compromiso. No solamente debe considerarse la valía de reconocer la situación de nuestro Estado, sino la de ir juntos por la mejora de una serie de factores que finalmente inciden en la medición de la competitividad.

El reto es mayúsculo, pero ya no se parte de engaños ni de discursos triunfalistas y huecos que apelan al pasado para tratar de alimentar el orgullo jalisciense, orgullo que finalmente resulta estéril si no tiene cimientos sólidos que permitan obtener mejores condiciones de vida para los jaliscienses.

Ya era hora de que, aunque sea implícitamente, se parta de reconocer que nuestro Estado se encuentra catalogado por estudios de la CEPAL como una zona en franco retroceso, y también de saber que Jalisco retrocedió en los últimos 12 años, del tercero al cuarto lugar, en cuanto a su aportación al PIB nacional.

Igualmente, de manera implícita, se inicia reconociendo el grave problema de contaminación que nos aqueja, y del hecho de que nuestra industria manufacturera ha venido desplomándose y hoy somos superados por Tlaxcala, Querétaro, Aguascalientes, Yucatán, Coahuila y ni qué decir del Distrito Federal, del Estado de México y de Nuevo León.

En el marco de la firma de este convenio se anunció que los avances en materia de competitividad serán medidos con la metodología del Instituto Mexicano de la Competitividad. Particularmente valioso es saber que esta metodología se diseñó antes de asumir el compromiso por mejorar nuestra competitividad, y que es la misma metodología que actualmente nos ubica en el lugar 16. Adicionalmente, se fijó una meta: llegar a los 10 primeros lugares. El reto de por sí es difícil, y más si consideramos que los Estados que nos superan también pueden mover sus indicadores. De ser así, el esfuerzo se tendrá que multiplicar.

Se miden 10 factores, y para hacerlo se consideran 120 variables. Si el compromiso va en serio, será una carrera de persecución. Cada variable exigirá un tremendo despliegue de esfuerzo y acciones concretas que puedan tener impacto. Para poner un ejemplo sencillo: si no se moderniza rápidamente el Registro Público de la Propiedad, o si no se mejora sustancialmente el sistema de administración de justicia, sólo serán un lastre en esta travesía.

Por si lo anterior fuera poco, también se anunció que se medirá el Índice de Desarrollo Humano, y que para ello se ha solicitado la colaboración de la Organización de las Naciones Unidas.Con este anuncio se aceptan las mediciones de organismos de la ONU que, por ejemplo, califican a Jalisco en el lugar 25 con relación al respeto a los derechos de nuestros adolescentes por su vida, su educación y su derecho a no ser explotados. También, de manera implícita, se parte de resultados de dependencias como la Secretaría de Salud del Gobierno Federal, que nos reprueba en la mayoría de los indicadores desarrollados por ellos para medir la salud de los mexicanos.

Las anteriores son ejemplos de mediciones en las que Jalisco sale muy mal parado. Lo mismo sucede con el estudio del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, donde Jalisco es décimo lugar en rezago social; el décimo segundo en analfabetismo y décimo sexto en materia de cobertura de servicios de salud, y así podríamos seguir.

En el artículo "Los retos de Emilio" (3/03/07) apuntábamos que "los logros del nuevo Gobierno estarán en función de estas calificaciones y de todas aquellas que nunca aparecen en la publicidad oficial ni en los informes de Gobierno. El grado de cumplimiento no estará en el monto que se gaste en publicidad oficial. Se cumplirá si Jalisco cuenta con políticas públicas que nos permitan salir de los sótanos de las clasificaciones. De ese tamaño es el reto; lo bueno es que se podrá medir".

El anuncio hecho el miércoles es un buen inicio en ese camino. Se reconoce la importancia de las mediciones y se ha aceptado el reto de jugar en esa cancha. Ahí están las tablas; el reto es ascender en ellas. No será nada fácil, pues no se compite solamente contra un récord propio. También los demás jugadores se mueven. Lo rescatable es haber entrado al juego. ¡Ya era hora!

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 10 de noviembre de 2007

Examen anual

No obstante que el Presidente de la República presentó ya su Primer Informe, no será sino hasta finales de mes cuando cumpla el primer año de Gobierno. ¿Qué ha pasado en estos 11 meses con la percepción que los mexicanos tienen de Felipe Calderón y de su Gobierno?

Una vez que los aparatosos operativos militares han sido progresivamente olvidados o que se ha diluido la fuerza con la que irrumpieron en la escena nacional; una vez que ha pasado la efervescencia del proceso electoral y postelectoral; y sin siquiera haber cumplido un año de Gobierno, hay indicios de que los focos rojos se han encendido en Los Pinos. La imagen del Gobierno federal se desinfla.

La encuesta que publicó a principios de semana Ipsos-Bimsa muestra que por segundo trimestre consecutivo la aprobación de Felipe Calderón va a la baja. La encuesta se puede consultar en www.ipsos-bimsa.com.mx. En marzo la aprobación al Ejecutivo se situaba en 68 por ciento; ahora reporta un 57. La cifra de los que lo reprueban ha ascendido del 21 al 33 por ciento. Incluso el porcentaje de los mexicanos que muestran una "aprobación dura" ha bajado de 17 a 12 puntos.

De los panistas, el 91 por ciento aprobaba al michoacano; ahora sólo el 82. En este segmento blanquiazul la reprobación ha pasado del 4 al 12 por ciento. El punto más preocupante es el segmento de los ciudadanos que no se atribuyen militancia alguna: los independientes. Aquí la aprobación pasó de 59 a 46 por ciento y la reprobación del 24 al 42 por ciento. La calificación del Mandatario también ha caído: de 7 ha pasado a 6.4.

No lo atiborraré de números. Calderón reporta peores cifras que Fox en su último mes de Gobierno. La encuesta también reporta la baja en la calificación del Presidente "como persona". Ante la pregunta de si el Presidente ha hecho más de lo que esperaban de él, el porcentaje ha bajado. Por el contrario, los que consideran que ha hecho menos de lo que esperaban, aumentó. También ha crecido el número de los mexicanos que no le creen al Presidente cuando habla o declara, y ha disminuido el número de los que le creen.

En cuanto a la percepción de si tiene la voluntad para hacer reformas importantes y si las está logrando, la apreciación es que no lleva a cabo reformas importantes o que, si tiene la voluntad, no lo está consiguiendo. Uno de los crecimientos más dramáticos es el de los mexicanos que creen que las reformas están favoreciendo a los más privilegiados. Lo mismo pasa con la percepción del camino que lleva el País: el porcentaje de mexicanos que creen que va por mal camino se dispara de manera notable, en la misma proporción que se desploma el porcentaje de los que creen que va por buen camino. Pasa igual en todos los ámbitos evaluados. Hoy, son más los que consideran mala la situación política del país.

Más que interesante resulta indagar en las causas de estos resultados. Una de las razones estaría en el aumento al precio de la gasolina. Tres de cada cuatro mexicanos reprueba este aumento... ¡y eso que todavía no entra en vigor! Seguramente las encuestas de Los Pinos advirtieron esto días después del anuncio del aumento, y esa sería la causa de la aparición presidencial en cadena nacional y en reiterados spots, con el propósito de aplazar la entrada en vigor del aumento y deslindarse de la autoría de la medida. Pero al parecer no fue suficiente, pues un buen porcentaje lo considera responsable del gasolinazo.

Otra de las causas de esta caída encontraría respuesta en el hecho de que los mexicanos han vuelto a pensar en los problemas que les aquejaban antes de las elecciones de 2006. Hoy en día, los temas que más preocupan a los ciudadanos son la falta de empleo, el aumento de precios y los bajos salarios.

Después de las elecciones, y hasta la toma de protesta de Calderón, esos problemas pasaron a segundo plano, y la agenda pública nos mandaba preocuparnos por la legitimación del futuro Presidente, la posible anulación de las elecciones, el plantón de Reforma, el exorcismo a los violentos y la confrontación y polarización.

Pasó la toma de protesta, y entonces la agenda pública nos pedía pensar en el problema del narcotráfico y el crimen organizado. Por cierto, la cifra de quienes consideraban (en enero) un éxito los operativos militares pasó del 35 al 26 por ciento. Los que los consideran un fracasó pasaron del 13 al 30 por ciento.

La situación económica con sus problemas de pobreza, empleos, precios y salarios ha vuelto por sus fueros y está de nuevo donde se quedó en junio de 2006. La principal preocupación de los mexicanos empieza a volverse inmune a los discursos triunfalistas y a las cifras oficiales. Muy pronto, para poco más de 300 días de Gobierno.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 3 de noviembre de 2007

¿Placazo o mitotazos?

Se vino abajo el placazo. Pero lo mejor es que se derrumbaran los mitos (mitotazos) que han quedado al descubierto con este tema.

Mito 1: "Todo lo que cobra el Gobierno es un impuesto". Así lo expresaron personajes de la vida local, pero es incorrecto. Lo que el Gobierno cobra son contribuciones. Un tipo de contribución son los impuestos, y también existen los derechos. Las placas (y el refrendo) son derechos, que son contraprestaciones por un servicio que proporciona el Gobierno, y no puede cobrarse más del costo que para éste representa prestar el servicio al ciudadano.

Mito 2: "Lo que se cobra por concepto de derechos se invierte realmente en el servicio que se presta". Mencionaré solamente un caso: el Registro Público de la Propiedad. Ahí no pocos servicios se cobran con cuotas carísimas; sin embargo, ni el servicio que se recibe vale lo que se está pagando, ni lo que ingresa se invierte en esta dependencia. Este tipo de casos son los que abonan a la desconfianza de la ciudadanía. Con tal tipo de evidencias resulta imposible convencer de que el dinero llega al destino prometido.

Mito 3: "Los derechos que pagamos están debidamente fundamentados en la Constitución". Los criterios de la Corte nos permiten ver con claridad que si la cantidad que se cobra por concepto de derechos no guarda una proporción con el costo real del servicio que presta el Gobierno, la disposición que regula el cobro es inconstitucional, y sí hay mecanismos para combatir con éxito esa parte de la norma. La evidencia empírica así lo demuestra.

Mito 4: "Los ciudadanos no pueden ampararse en contra de la medida". Los casos de Guanajuato en 2001 y de Durango en 2006 demuestran lo contrario. En el segundo caso, el Gobierno tuvo que devolver la diferencia entre el costo y el cobro al ciudadano en poco más de 3 mil casos.

Los ciudadanos sí pueden ampararse contra el cobro excesivo, llámese placazo o refrendazo. El incentivo de recurrir al amparo es directamente proporcional al monto del cobro pretendido. Una cantidad considerable de personas estarán dispuestas a pagar el refrendo y evitarse las molestias de un trámite para la mayoría desconocido: el amparo. Cuanto mayor sea la cantidad a pagar, mayor será el número de personas dispuestas a combatir la medida.

Mito 5: "Las placas deben cambiarse cada tres años". Argumentan que la Norma Oficial Mexicana (NOM) así lo establece. Por más veces que usted lea la referida norma, es prácticamente imposible que encuentre redactada con la mínima claridad la pretendida obligación. La justicia federal resolvió (en el caso de Guanajuato), que lo que dijera la NOM no tiene incidencia alguna sobre la obligatoriedad de cambiar o no las placas con la periodicidad ahí referida. Lo anterior es así porque esa periodicidad (según la justicia federal) tiene que ver con parámetros de calidad de los materiales, no con la obligación de renovarlas. No son pocos los estados que cuentan con láminas con más de tres años... ¡y no pasa nada!

Mito 6: "Debemos creer que las placas durarán el tiempo que nos prometieron". Nos dijeron que durarían diez años y a los seis ya las querían cambiar. Pero hay casos más graves: en Guanajuato la tarjeta de circulación establecía la duración de las placas, pero tampoco eso valió ante la justicia federal. Lo único que vale, según el criterio jurisdiccional, es que la duración se establezca en la Ley de Ingresos. Durango aprendió la lección y así lo plasmó en una reforma.

Mito 7: "La recaudación de lo que hace falta se hace cobrando derechos". Somos un País que cobra muy caros algunos derechos. Pretender cobrar por la vía de los derechos "lo que hace falta" es inventar el agua tibia, es ir en contra de la Constitución. Es cierto, viene pasando en muchos casos, desde hace mucho tiempo, y la gente no decía nada. Si hoy se manifiesta no es porque no sea solidaria, es porque reacciona con la inconformidad acumulada de estar pagando servicios de tercera con costos de primer mundo. Y ni en el primer mundo. Un caso que ejemplifica este fenómeno es el del pasaporte. En México un pasaporte por diez años cuesta mil 630 pesos, mientras que en España el mismo servicio cuesta aproximadamente 200 pesos mexicanos.

En el caso del refrendo, Jalisco se pondrá a la cabeza de los estados más caros en este rubro. El mismo servicio cuesta: en Aguascalientes 290 pesos, en Baja California 254, en Chiapas 380, Sinaloa 300, Sonora 385. Destacan los casos de Coahuila, de 164 a 312 pesos y Chihuahua, de 256 a mil 310 pesos. En ambos casos los vehículos más viejitos pagan menos, medida que parecería justa... pero es inconstitucional.

Mito 8: "Nos endeudamos porque no quisieron pagar". Entonces, para no endeudarnos, deberíamos aceptar medidas inconstitucionales y sorpresivas. Nadie advirtió oportunamente que el cobro indebido de derechos era la llave para lograr las promesas.

La verdad es que nos endeudamos ahora porque lo dejamos de hacer en el sexenio de Alberto Cárdenas. En ese sexenio se condenó la enorme deuda que se había heredado (3 mil millones) y siempre se actuó con la tara de que endeudarse era malo. Mientras tanto, otros estados se endeudaban y hoy reportan mejor desempeño que Jalisco. A trece años de la alternancia y al concretarse el primero de los préstamos (ya autorizado) para Arcediano y los 2 mil millones que pedirá el Gobernador, la deuda pública estatal habrá llegado a poco menos de 12 mil millones. Tendremos a Nuevo León a tiro de piedra de arrebatarle el tercer lugar nacional de endeudamiento. Por cierto, según la Secretaría de Hacienda, Guadalajara tiene el liderato nacional en deuda pública municipal, con poco más de 736 millones.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 27 de octubre de 2007

Riesgo invisible

Las muestras de inconformidad ciudadana en contra del placazo han despertado interés y dudas. No sabemos qué tan extendido, intenso y profundo es el malestar. Tampoco si resistirá al enemigo letal para este tipo de movimientos: el tiempo. Sin embargo, el enojo no ha permitido el espacio de estudio y reflexión del tema. Entre otros aspectos, se ha dejado de lado el aspecto jurídico.

Un ejemplo de esto es el hallazgo de la Acción de Inconstitucionalidad 1/2007, promovida por el Procurador General de la República, y cuya resolución fue publicada el 10 de septiembre de 2007. La acción fue interpuesta en contra de la Ley de Ingresos de Chiapas. La resolución de la Corte nos permite ver con claridad que algunas propuestas alternativas que han sido planteadas son inviables, como la que hizo el Cardenal y que coincide con la expuesta en este mismo espacio hace una semana, respecto a diferenciar el costo de las placas. De tomarse la medida de diferenciar el costo de las placas, y de ejercitarse una acción, la Corte se pronunciaría por la inconstitucionalidad de diferenciar el costo de los derechos por un mismo servicio. Este pequeño detalle debe ser tomado en cuenta seriamente por el Poder Ejecutivo. Veamos por qué.

De manera didáctica, la resolución referida expone las distintas especies del género contribución: impuestos, aportaciones de seguridad social, contribuciones de mejoras y derechos. Retoma la definición de los "derechos": básicamente son contribuciones por un servicio. La Corte establece que los derechos respetan los principios constitucionales de proporcionalidad y equidad cuando existe un equilibrio razonable entre la cuota y la prestación del servicio, y cuando se da un trato igual a los que reciben un servicio análogo. De ahí que no puede haber tarifas diferenciadas. De ahí también que si las placas cuestan al Gobierno 150 pesos, algunos podrían argumentar que no existe un equilibrio razonable en pretender cobrarlas a mil 200, la Corte tendría la última palabra.

Las placas son "derechos", así lo establecen la Ley de Hacienda (Artículos 1, 68, 69 y 70) y la Ley de Ingresos de Jalisco (artículos 1º y 22). El pago por la dotación, canje y refrendo de placas son del tipo de contribuciones que se tipifican en esa especie.Veamos algunas tesis de la Corte respecto a los derechos; todas referidas en la resolución de la Acción de Inconstitucionalidad 1/2007. La tesis P/J8/97 dice que el pago de derechos no es proporcional ni equitativo cuando no guarda relación con el costo de revalidación que presta la autoridad, pues el derecho se estaría cuantificando en términos de un elemento extraño al servicio prestado.

La tesis P. CXIII/96 establece: "tratándose de derechos por servicios, el criterio de proporcionalidad y equidad se refiere al costo del servicio que específicamente preste el Estado. De aquí que, aun cuando no es necesario que la cuota del derecho refleje con precisión matemática el costo del servicio, en cambio sí es necesario buscar un factor que guarde relación con dicho costo para establecer la cuota de tributación, lo cual, incluso, puede ser excepcionalmente dispensable cuando exista una razón de orden extrafiscal". En sentido similar se pronuncia en la tesis P CI/95. También, la tesis P/J 2/98 establece: "los derechos deben fijarse no con exactitud matemática al costo del servicio prestado, pero sí guardando relación con éste".

La Corte, al resolver establece: "el artículo 31, fracción IV, de la Constitución regula los principios que deben regir las contribuciones... ya que consagra los principios constitucionales tributarios de reserva de ley, destino al gasto público, proporcionalidad y equidad: los cuales, además de ser garantías individuales, enuncian las características que pueden llevarnos a construir un concepto jurídico de tributo o contribución con base en la Norma Fundamental... de acuerdo con la autonomía de las entidades federativas y con el sistema de distribución de competencias que prevé la Constitución... cada Estado para sí y para sus Municipios, tiene libertad para realizar su propia configuración de las categorías de las contribuciones o tributos, imprimiendo los matices correspondientes a su realidad; sin embargo, esta libertad no autoriza al legislador para desnaturalizar estas instituciones, por lo que debe respetar sus notas esenciales tanto en lo referente a su naturaleza como contribución, como a las notas de sus especies". Si bien es cierto que el Gobierno fija las contribuciones, según la Corte, debe hacerlo atendiendo ciertos criterios.

Ahora bien, se puede argumentar que las tarifas diferenciadas son inconstitucionales, y sin embargo la medida (de diferenciar tarifas) fue revertida en Durango y prevalece en Yucatán. La diferencia puede estar en si se ejercita o no la Acción de Inconstitucionalidad. Ahí estaría el riesgo real de esta medida. En el caso de Jalisco, podría hacerlo el Procurador General de la República. El procurador actual ya lo hizo en contra de la Ley de Ingresos de Chiapas, aunque no en el caso de las placas. También podrían hacerlo 13 de los 40 diputados locales. En caso de hacerlo, deberían presentarla dentro de los 30 días naturales siguientes a la fecha de publicación de la Ley de Ingresos del Estado de Jalisco.

La Corte estaría resolviendo aproximadamente en septiembre de 2008 y podría estar aplicando los criterios que han sido expuestos. Ahí estaría el mayor riesgo de que esta medida sea revertida. Es uno de los puntos que no se han tocado, ya que nos hemos concentrado solamente en la reacción de una parte (todavía no sabemos qué tan grande) de la ciudadanía.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 20 de octubre de 2007

El engaño de las placas

Esta semana el Gobierno del Estado anunció su intención de renovar las placas vehiculares. Esta película ya la habíamos visto en 2001. Vale la pena ejercitar la memoria y analizar varios aspectos colaterales de esta medida.

En aquel entonces, el primer argumento que se esgrimió fue que la medida obedecía a la disposición de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Como quien dice, no fue porque la autoridad local quisiera, sino por disposición de la autoridad federal. La reacción de los partidos de Oposición fue de rechazo a la medida. Emilio González Márquez, entonces dirigente estatal del PAN, comentó: "todos los ciudadanos no quisieran pagar más contribuciones, pero que en este caso se trata de un requisito que pide la Secretaría de Comunicaciones y Transportes... Como ciudadanos todos los gastos los queremos evitar, pero las cosas que tenemos que realizar, como pago de derechos, las tenemos que hacer; antes se hacía cada dos años y no pasaba nada, no veo qué haya cambiado como para que ahora se piense que es innecesario", señaló el entonces líder panista.

En 2001 la autoridad declaró que cada juego de placas costó 116 pesos, mientras que al ciudadano le costaron 600 pesos. Estamos frente a una medida eminentemente recaudatoria, y así lo reconoció la autoridad: "Necesita Gobierno dinero; cobrará más caras las placas", tituló MURAL el 17 de noviembre de 2001. En la nota, el entonces Secretario de Finanzas, Ignacio Novoa López, dijo: "Tenemos la necesidad de obtener recursos, entre menos recursos tengamos para ir dando soluciones a las necesidades urgentes (tendríamos) que recurrir a deuda y queremos lo menos (posible) endeudar al Estado".

Lo extraño de esta situación es que en el documento "Deuda Pública del Distrito Federal", elaborado en 2005 por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, mismo que puede consultarse en www.cefp.gob.mx/intr/edocumentos/pdf/cefp/cefp0522005.pdf, se aprecia que en términos absolutos, durante el Gobierno de Ramírez Acuña la deuda pública aumentó 49.66 por ciento. En millones constantes subió 16.78 por ciento. Como porcentaje del PIB, Ramírez Acuña no la subió, pero tampoco la bajó. Como porcentaje respecto al saldo total de la deuda de los Estados, Ramírez Acuña la subió medio punto porcentual. En términos per cápita aumentó 9.44 por ciento. En prácticamente todos los rubros indicados, Jalisco supera en deuda pública al Distrito Federal, donde paradójicamente no se cobran las placas. Estos datos no consideran el monto de la deuda por la Presa de Arcediano. En el momento en que se apliquen estas cifras a los cálculos, Jalisco se consolidará como toda una referencia en materia de deuda pública.

El argumento de "placas caras = no endeudamiento" se diluye frente a estas cifras. Pero no es lo único que se ha diluido. En 2001 nos dijeron que las placas durarían 10 años. No será así; apenas habrán durado seis. No se cumplió el ofrecimiento. Ni hablar del "código de barras" de las láminas que, según el lector óptico, sólo dice JALISCO 14; de la nula visibilidad de los últimos dígitos; de la publicidad institucional (que se vuelve a repetir); o de la tinta de los dígitos de las placas de taxis, que también se diluyó desde los primeros meses.

El candidato González Márquez no mencionó durante su campaña que tomaría este tipo de decisiones ni mucho menos la magnitud del aumento. Hoy en día se debería aplicar un cuestionario a los candidatos que permita transparentar todas las acciones que realizarán y no únicamente las que se prestan al lucimiento.

Ante estas inconsistencias y engaños, es imprescindible que se establezca con claridad la duración de las nuevas láminas. También resulta de elemental lógica que el pago sea proporcional; esto es, si las láminas van a durar únicamente tres años ¿no resultaría justo que el comprador de un vehículo en 2010 pague solamente la parte proporcional?

Hay entidades donde las placas actualmente son más caras que para el automovilista en Jalisco: en Nayarit cuestan 660 pesos; en Chiapas, 685; Baja California, 713; Zacatecas, 740; Durango, mil 146 y en Chihuahua cuestan 2 mil 310 pesos. Hay otras entidades donde las placas cuestan menos: Tamaulipas, 214 pesos; Guerrero, 278; Aguascalientes, 305; Quintana Roo, 438; Sonora, 478; San Luis Potosí, 500; Guanajuato, 535 pesos. También está el caso extremo del Distrito Federal, donde no tienen costo. Con el aumento a mil 200 pesos, Jalisco se pondrá entre los Estados con placas más caras.

No estaría por demás explorar la fórmula de Yucatán, donde los vehículos con menos de tres años de antigüedad y con valor de factura mayor a 250 mil pesos pagan 658 pesos; los de menos de 250 mil pesos pagan 357 pesos. De 4 a 9 años de antigüedad y de más de 250 mil pesos, pagan 412 pesos; de menos de 250 mil pesos, pagan 357. Más de 10 años de antigüedad y valor mayor a 250 mil pesos, pagan 357 pesos; de menos de 250 mil pesos, pagan 302 pesos. Pero no, no damos para tanto, y las prioridades son otras.

El argumento de "placas caras = no endeudamiento" ha sido sustituido por el de "placas muy caras = proyectos estratégicos". El primer argumento resultó un engaño... veremos si no pasa lo mismo.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 13 de octubre de 2007

Tonalá de los Saguaros

Varguitas, Alcalde de San Pedro de los Saguaros, ha sido reinterpretado por Vizcarra de manera sublime, magistral. Quizás Vizcarra se encomendó a Santo Toribio para superar a Damián Alcázar, pero al santo se le pasó la mano

Todo indicaba, al inicio, que llegaba con el apoyo divino. "Dice que gana por el apoyo de Santo Toribio"; así tituló MURAL la nota del 19 de diciembre de 2005 que daba cuenta del triunfador en la contienda interna del PAN, en la que se disputaba quién sería el candidato de ese partido para encabezar el Gobierno municipal de Tonalá, Jalisco.

La misma nota consignó: "Emocionado, con los ojos llorosos, el ganador agradeció a su familia, a la Virgen de Guadalupe y a Santo Toribio, a quienes se encomendó para obtener el triunfo. En cuanto pueda, irá a visitar al Santo para darle las gracias por el apoyo".

Vaya usted a saber las razones que tuvieron estas santidades para impulsar a Jorge Vizcarra para que no solamente fuera candidato sino Presidente Municipal de Tonalá. Vaya que el apoyo cuasi divino fue necesario, pues en la primera ronda había 402 votos en juego y el ganador requería la mitad más uno (202).

En esa primera ronda, Vizcarra solamente obtuvo 189 votos, por 117 de su más cercana competidora; 55 del tercero, 40 del cuarto y un voto nulo. Los votos no fueron suficientes para ganar en esa instancia. En la segunda ronda se anularon cuatro votos: Pitágoras dice que con todo y eso quedaban 398 votos, que se disputaban el primero y segundo lugar. Vizcarra obtuvo 199 y su contrincante 197. Nadie explicó qué pasó con los dos votos faltantes. Vizcarra ganó apenas por dos votos.

Todo esto fue reportado en la nota de MURAL, y también reportó que "...Ricardo Sigala Orozco, presidente del Comité Directivo Municipal, la hizo de organizador en las dos rondas...". Sigala, el mismo que fue jefe de Vizcarra en la Secretaría de Administración, cuando la encabezaba Abraham González Uyeda; el mismo que Vizcarra empoderó como su brazo derecho y hombre fuerte; el mismo que no aparece en público, que ha pedido licencia y, por si fuera poco, es señalado en diversas actuaciones por la comisión de varios delitos.

Ricardo Sigala... el mismo que fue señalado durante el proceso interno panista para elegir candidato a la Presidencia de la República, por Luis Jiménez Manzo (representante de Santiago Creel), por hacer campaña en favor de Felipe Calderón, según lo consigna la nota de MURAL del 24 de octubre de 2005, titulada "Es Tonalá el negrito en el arroz".

Todo indica que no solamente los santos (como Santo Toribio, mártir de la guerra cristera y santo patrono de los indocumentados y futbolistas) han abandonado a estos jóvenes políticos; también habrían sido dejados a su suerte por los santos de la política, quienes participaron en su encumbramiento. Contrario a su estilo, el dirigente estatal del PAN, Eduardo Rosales, ha dejado pasar la oportunidad de defender a sus muchachos. En la misma línea se ha mantenido quien les dio trabajo: el subsecretario de Gobernación del Gobierno federal, Abraham González Uyeda.

La furia de los dioses se ha ensañado contra las autoridades tonaltecas, al grado que ni las misas funcionan ya para ellos. El 9 de enero de 2007, MURAL tituló "Dan misa para nuevos gobernantes"; la nota nos cuenta de la ceremonia religiosa ofrecida por la máxima autoridad eclesiástica en la región, misma que se desarrolló en lo que algún día será el Santuario de los Mártires. En esa ceremonia, los Alcaldes de los Municipios metropolitanos hicieron las peticiones... habría que preguntarle a Vizcarra qué fue lo que realmente pidió.

El único santo que no ha abandonado a los personajes de este culebrón es San Pedro de los Saguaros, ese pueblucho en el que se desarrolla la trama de la película La Ley de Herodes. Ahí, Juan Vargas (Varguitas) ha sido reinterpretado por Jorge Vizcarra de manera sublime, magistral. Quizás Vizcarra también se encomendó a Santo Toribio, o lo pidió en la misa que ofició el Cardenal, para superar al actor Damián Alcázar (Varguitas), pero al santo se le pasó la mano; Vizcarra no solamente ha superado a Alcázar: lo ha humillado. El guión de La Ley de Herodes ha sido respetado de manera formidable. La devoción religiosa, los giros extorsionados, asesinatos, intrigas, enriquecimiento. Pareciera que no hay elemento que no se replique.

Lo que resulta inexplicable es la militancia de Vizcarra. Según la película, este papel debería recaer en un priista. Vizcarra es panista, y la verdad es que siendo tan honestos no se entiende que sea del PAN. Lo más seguro es que Vizcarra no pertenezca al PAN y que se infiltró para desprestigiar a ese grupo de mexicanos caracterizados por sus altos valores morales, por su elevado sentido de la ética y porque son garantía de desterrar los vicios que nos dejó el PRI.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 6 de octubre de 2007

Realidad foxiana

Si las fundaciones Centro Fox o Vamos México tienen fines tan nobles, por qué habría de cuestionarse que los Fox se llevaran pequeños detalles

Sobran adjetivos para Vicente Fox, pero las más recientes revelaciones nos permiten concluir que estamos frente a una personalidad con serios trastornos. Fox se ha consagrado como un hombre mitómano, desmemoriado, bipolar, mantenido y, por si fuera poco, débil ante las tentaciones materiales.

La mitomanía es la tendencia morbosa a desfigurar, engrandeciéndola, la realidad de lo que se dice. Varias publicaciones han dado cuenta de las pequeñas y modestas propiedades de Fox. "No es mío ese rancho, no son mías esas propiedades, no son mías esas cabañas en esos terrenos", habría dicho el ex Presidente de manera enfática, elocuente.

Investigaciones que han sido publicadas después de la verdad foxiana demuestran que Fox miente. Miente, como lo hizo cuando dijo que ningún funcionario del Gobierno mexicano había presionado a Fidel Castro para salir de México en aquella visita a Monterrey. El "comes y te vas" reveló la mentira. Los datos del Registro Público de la Propiedad ahora conspiran contra Fox, al igual que conspira el hecho de que las cabañas construidas en el rancho sean obra del mismo arquitecto que hizo las de Los Pinos.

Fox, que se cree sus mentiras, lo cual es propio de un mitómano, nos dice dónde hay que buscar su patrimonio. Según él, sus declaraciones patrimoniales son la fuente única de verdad. Lo curioso es que en esas declaraciones no aparecen sus vehículos: ni el Jeep rojo flama, ni el (o los) Hummer, ni el Jaguar; a excepción de este último, hay múltiples evidencias de que los otros vehículos ya eran usados por Fox antes de concluir su gestión.

El caso del Jeep revela otras debilidades de la pareja. Se ha documentado que el vehículo fue comprado por un empresario a petición expresa de la señora Sahagún. El empresario ofrece pormenores de tiempo, modo y lugar. El Jeep fue un "regalo" que habría hecho la detallista y amorosa Primera Dama a su esposo con motivo de su Segundo Informe de Gobierno. ¡Qué lindo!Sólo que este es un regalo que, por su monto, prohíbe la ley, como muchos otros que habrían recibido, según varias publicaciones, y que se habrían llevado para acrecentar el patrimonio familiar o quizás el de las nobles fundaciones: Centro Fox o Vamos México. Vamos, si esas fundaciones tienen fines tan nobles, por qué habrían de cuestionarse estos pequeños detalles. Si fueron para el patrimonio familiar, entonces la argumentación de la defensa y de la contraofensiva está lista: los de antes robaron más.

Lo que pasa por alto el ex Presidente es que no está enfrascado en un debate con militantes o simpatizantes del PRI, sino con los medios de comunicación que han revelado estas conductas.

Enfático al negar las propiedades que manifiesta ante la autoridad registral, conduce con toda normalidad un vehículo que formalmente no es de su propiedad. No aparece en sus declaraciones ni está a su nombre, pero no hay duda, es suyo. Fox se revela como un mantenido, como un gorrón. Le "dispararon" el coche, pero no es lo único que le han "invitado".

Lino Korrodi revela que con recursos de "Amigos de Fox" se apoyó al ex Presidente para comprar el rancho La Estancia -pegado a la casa donde siempre ha vivido-, así como para pagar el predial de una casa de playa que tenía en McAllen, Texas, y asegura que esa agrupación prácticamente mantuvo al entonces candidato, quien tenía problemas económicos y vivía en una casa modesta con muebles rústicos y a la que se llegaba por un camino de terracería; camino que cambió de rostro con las obras que se realizaron con recursos públicos para la reunión Bush-Fox, memorable encuentro de la Diplomacia Marlboro. Si la plusvalía de los terrenos subió no fue algo premeditado, sino un mero accidente.

Para Fox, esa es la realidad que vale y la que él cuenta. Si el Jeep no existe en las declaraciones patrimoniales, entonces él se traslada flotando. Si todos vemos un Jeep rojo, eso corresponde a nuestra realidad. En "Mundo Fox", sus amigos adinerados son comprensivos, generosos, desinteresados y desprendidos. Lo mantuvieron y le dieron regalitos a cambio de nada. Fox es merecedor de todo eso, hasta del voto de los mexicanos que lo llevaron a la Presidencia. Total, si nunca retribuyó un favor, por qué habría de retribuir la confianza que le otorgó el sufragio democrático.

En esa realidad foxiana, él puede y tiene que seguir siendo el foco de la atención, a cualquier costo, y tiene que contar con la paciencia y comprensión de todos. Quien se atreva a cuestionarlo está fuera de su realidad; ahí solamente los ex Presidentes priistas son sujetos de escrutinio y señalamiento, él no. En esa dimensión, él sigue siendo Presidente, así se nombra y pide a todos que así lo llamen. Por eso es lógico que pida que no lo juzguen como ex Presidente.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 29 de septiembre de 2007

Diques rotos

Lo que estamos presenciando en el país es el inicio del rompimiento del dique que dividía las aguas de la izquierda con las de la derecha. No quiere decir que se hayan mezclado por completo y que ahora formen un solo cuerpo acuífero, eso nunca sucederá; sin embargo, esto es mucho más que leves escurrimientos o desbordamientos. Tres acontecimientos trascendentes de la última semana apuntan en ese sentido: las reformas electoral y fiscal y el discurso de Felipe Calderón ante un puñado de líderes mexicanos.

La reforma electoral se consumó. A pesar de los fallidos amagos de las empresas concesionarias de los medios electrónicos. A pesar de los pronunciamientos vergonzosos de los organismos empresariales, que hablan de democracia como si la practicaran en sus ámbitos. No obstante los devaneos de algunos Gobernadores que enseñaron el cobre dejando en claro a quién responden más allá de sus electores y sus partidos; qué poca vergüenza de estos Mandatarios (y de quien se siente vicepresidenta del país) al manifestar de manera descarada su intervención en asuntos que competen al legislativo de sus entidades y no a ellos.

Lo que apuntaba como un encuentro parejo entre los Estados que aprobarían la reforma y los que no, se convirtió en una goliza tremenda, de escándalo, y eso que todavía no termina el partido. El dique defensivo hizo agua, se rompió. No pudieron estos factores de poder detener la fuerza de la corriente emanada y consensuada en el Congreso de la Unión. El dique conformado por Elba Esther y sus Gobernadores, por los organismos empresariales y por el poder televisivo cedió.

Quienes invirtieron tiempo, dinero y esfuerzo en su afán por evitar que llegara "el peligro para México" han quedado atónitos al ver desmantelada la maquinaria pesada que utilizaron en su encomienda.

El segundo acontecimiento se refiere a la reforma fiscal. Si bien es cierto que el PRD votó en contra de ésta y que no nos llevará a los niveles de recaudación de Brasil, Chile o Argentina, la forma en que la Secretaría de Hacienda defiende el logro es lo que más llama la atención. El spot televisivo y radiofónico (vaya paradoja que sea mediante un spot), dice: "-Oiga compadre, ¿usté entiende que es eso del IETU y por qué los empresarios se quejan tanto? -Pos cómo que por qué, porque es un impuesto que los hace pagar como debe de ser. -¿A poco no los pagaban? -Algunos sí, y otros no lo que debían ser; y ahora sí, todos vamos a jalar parejo y van a pagar más los que más tienen. -Pos así debe de ser, ¿no? -Claro!.." ¡Tómala! No parece, por mucho, un spot de un Gobierno de derecha. Más bien parece un extracto tomado de un discurso de campaña de AMLO.

El dique de los mitos también hace agua. El discurso tramposo que por años permeó, y que atribuía la pobre recaudación fiscal únicamente al comercio informal, ha dejado de ser útil. Poco hizo la izquierda para combatir el mito. Antes el FMI, el BM, el BID y la CEPAL llegaron a la conclusión, mediante estudios científicos y técnicos, que la exigua recaudación tenía su origen en la evasión de los grandes empresarios.

Como consecuencia de la reforma fiscal se avizoraban aumentos a combustibles. El miércoles, en cadena nacional, Felipe Calderón dijo: "...he decidido detener la entrada en vigor del aumento al precio de la gasolina en los términos solicitados por los legisladores... En el mismo sentido, anuncio que el Gobierno Federal cancelará cualquier aumento a los precios de la gasolina magna, del diesel, el gas LP, el gas licuado de petróleo y las tarifas eléctricas ordinarias de consumo doméstico durante todo este año... En otras palabras, no habrá aumentos a la gasolina ni al gas LP ni a la electricidad en los próximos meses con objeto de proteger la economía de las familias más pobres...". Algunos editorialistas (los "Luis Pazos reloaded") se sienten como cónyuges engañados: ¡¿cómo es posible que el Presidente haga esto?! El dique que dividía la orientación económica de los partidos de izquierda y derecha se ha empezado a desmoronar. Con esta medida, Calderón se acerca a la postura del PRD ¡y a la que enarbola en estos mismos momentos el propio AMLO!

El último de los acontecimientos es el discurso de Felipe Calderón ante 300 líderes mexicanos. Delante de ellos los llamó minoría selecta y élite. También dijo: "... Cuántas fortunas se han construido sobre la sangre y sobre el dolor de esa mitad de mexicanos... Y más atrás, cuántas batallas hemos perdido, cuánto territorio, cuánta mediocridad hemos aportado entre todos para hacer de este País enorme, bendito por sus recursos naturales, por su historia, por su identidad, uno más entre el ciento de países que pueden hacerlo, pero que no lo han hecho". Les endosó la mayor responsabilidad en la transformación de México y de pilón les recetó: "... transformemos a México, y entonces sí nos llamaremos líderes del país". En otras palabras, les cuestionó el adjetivo autoimpuesto por ellos mismos.

Los diques han empezado a ceder. Nadie sabe el final de la historia, pero el agua estancada y pestilente ha empezado a correr. En el mes de la Patria, ese ya es motivo para celebrar.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 22 de septiembre de 2007

Triunvirato

No hay mejor antídoto para un panista que otro panista. La evidencia empírica así lo demuestra. Tanto en el ámbito nacional como local, una vez que los panistas llegan al poder sus problemas, en la mayoría de los casos, no se deben a la Oposición, sino que tienen un origen interno, sea por una pésima actuación en el poder o sobre todo por las fisuras internas que terminan en división, persecución, fractura o confrontación.

Este patrón es el que se manifiesta con la iniciativa de reforma en materia de fiscalización, enviada por el Gobernador al Congreso. La propuesta encontró el respaldo total de las demás fuerzas políticas y resistencia en su propio partido. El Gobernador habría acordado la propuesta con todas las fuerzas políticas, pero cometió el error de no consultarlo con quienes junto con él, y según ellos (Rosales y Salinas), conformarían el triunvirato que ejerce el Poder Ejecutivo en Jalisco.

Lejos de ser la primera vez que esto sucede, ya es algo sistemático. Más allá de los pretextos que se exponen, el Gobernador ha encontrado en una subfracción panista del Congreso una Oposición sistemática y férrea. No importa el tema; no puede moverse sin sentir el rigor de la marca personal de Eduardo Rosales y Jorge Salinas.

Se han ido los tiempos en los que el partido en el poder y sus diputados apoyaban ciegamente a su gobernante, y han dado paso a una nueva configuración de fuerzas. A primera vista resulta sano, pero esta nueva realidad entraña una serie de factores que merecen ser analizados.

A lo que se ha llegado en Jalisco es a reivindicar el derecho a disentir de las propuestas del Ejecutivo. Ahora se ve como algo normal y hasta conveniente. Sin embargo, esta reivindicación no ha sido en favor del voto libre de los diputados, sino que se endosa en favor del presidente del partido en el Gobierno. Si bien hay derecho a disentir con las propuestas del Ejecutivo, este derecho no se puede ejercer contra el presidente del partido.

El Ejecutivo no debe ejercer coacción hacia los diputados, eso está bien. Lo que resulta terrible es "la nueva línea", que se refleja en la coacción que sí ejercen dos de los integrantes del triunvirato. Se ha llegado al punto de amenazar a los diputados y regidores de ser expulsados si no votan en bloque. Esta sanción podrá estar prevista en los estatutos panistas, pero sin duda contraviene el marco constitucional, aunque ha sido un mecanismo eficaz de alineamiento. Pasamos de la línea del Ejecutivo a la línea de los otros integrantes del triunvirato. El Ejecutivo pierde, el líder partidista y el coordinador de los diputados ganan, los diputados y los ciudadanos quedan igual. Sin duda, es un cambio; el punto es quiénes son los principales beneficiados.

En países desarrollados es totalmente normal que el Ejecutivo se dé a la tarea de cabildear de manera directa, el voto con cada uno de los legisladores de todos los partidos, incluido el propio. Es un "toma y daca" donde los diputados obtienen beneficios para sus distritos. Lo hacen de manera directa porque están actuando entes políticos libres y el resultado de la votación no tiene necesariamente una correlación con la configuración partidista del Congreso. Lo que escapa de toda lógica en Jalisco es la obsesión por arrinconar al Ejecutivo a tratar todos los asuntos con el presidente de su propio partido en una relación de pares, en la sala de sesiones del triunvirato. Todavía peor, en el caso de la reforma al marco de fiscalización, se podría dar el caso de que el presidente del CEN del PAN, instancia de apelación ante las diferencias de los integrantes del triunvirato, estuviera resolviendo los asuntos de los jaliscienses.

Si los diputados representan a los ciudadanos que los eligieron, es a ellos a quienes deben rendir cuentas y justificar sus actos. Si alguien puede intimidarlos y obligarlos a votar en determinado sentido, la representación popular que ostentan es una representación acotada, limitada.

Extraño escenario el que vivimos: los votos de los diputados del partido en el poder, que hacen mayoría al coincidir con las demás fuerzas políticas, son anulados por una "mayoría intrapartidista", que en realidad es minoría en el Congreso, pero que cuenta con la fuerza de dos de los integrantes del triunvirato.

Que el Ejecutivo ceda o negocie no es nuevo; tampoco lo es el hecho del poder de las minorías, que en muchos casos terminan decidiendo. Lo extraño es que estas cesiones sean con su propio partido; que la minoría que decide sea una subfracción del partido en el poder, que hasta verse perdida recurre con estridencia a los medios de comunicación.

Ante este escenario, los argumentos que se han expuesto no sorprenden. Quien públicamente ha amenazado a sus compañeros de ser expulsados de su partido, denuncia amenazas. Quien se asume como par del Gobernador, desconfía de la legitimidad de las propuestas del Ejecutivo, no importa si su mentor, en su momento, consintió el nombramiento de la misma persona. Quien ha callado ante el lavado de cuentas públicas, hoy exige rendición de cuentas.

Mientras se dirimen las disputas internas, los diputados de Oposición disfrutan el espectáculo, toman nota de los argumentos que avivan la lucha al interior del PAN y esperan el día en que los dejen ser Oposición. Entonces les habrán dejado abonado el terreno. Nada extraño. Lo curioso será ver cómo los que hoy se oponen al Gobernador serán los primeros en rasgarse las vestiduras. Sin duda, será interesante ver el catálogo de adjetivos que expresarán en su momento, mismos que les autoaplicarán de manera retroactiva.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 15 de septiembre de 2007

Vestiduras rasgadas

Los retazos de las vestiduras volaron sin ton ni son. La Reforma Electoral aprobada por el Senado nos ha permitido ver uno de los espectáculos cumbre del fariseísmo. Los concesionarios de los medios electrónicos y sus empleados pusieron el grito en el cielo. A su juicio, el Senado atentó contra la libertad de expresión: denunciaron que vivimos bajo una partidocracia y hasta pidieron someter la reforma a referéndum.

Con la reforma, los partidos políticos no podrán contratar espacios publicitarios por su cuenta. Las ventajas que esta medida traerá son importantes. El IFE destinará menos tiempo en los procesos de fiscalización y se estará ahorrando la revisión y cotejo de facturas. Se eliminará el trato discrecional en las tarifas, que constituía un elemento de inequidad casi nunca mencionado en los programas televisivos de análisis político.ç

Llama la atención que los concesionarios de los medios electrónicos ahora se rasguen las vestiduras, cuando ellos establecieron la política comercial de "según el sapo es la pedrada"; esto es, si un partido compra mucho le dan más barato, si compra poco, más caro. Recordemos que son los mismos que han ignorado olímpicamente el contenido del artículo 48 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, que establece que las tarifas de campañas no deben ser superiores a las de publicidad comercial. En realidad, las tarifas de campaña son más caras que las comerciales. Los concesionarios se han pasado por el arco del triunfo la ley, con la complacencia de los integrantes del Consejo general del IFE (de éste, y de los anteriores).

Inclusive, en foros públicos los consejeros han defendido el hecho de que este precepto se vulnere. Vivimos en un país de instituciones y leyes (eso dicen)... siempre y cuando no se vulneren los privilegios, en este caso, de quienes reciben carretadas de dinero del erario vía los partidos políticos, y que son los mismos que critican el gasto de sumas millonarias. Son los mismos que magnifican el descrédito de los políticos y de los partidos, sin reparar que los bajos niveles de aceptación en parte se deben a las prácticas de las cuales son partícipes. Son los mismos que no transparentan los ingresos provenientes de los partidos ni de sus patrocinadores, y luego reclaman transparencia. Les conviene tener partidos y políticos débiles, pues requerirán en algún momento del auxilio de la videocracia, y es ahí cuando se puede pactar con todos, no importando el color.

En su reciente gira por la India, el Presidente Calderón dijo querer imitar el crecimiento económico de aquel país. Haríamos bien en imitar lo que en otros países está funcionando y en abandonar las prácticas que nos han llevado al lugar en el que estamos. En el caso de los spots, por qué no se dice que en Argentina la ley establece espacios en los medios de radiodifusión: 50 por ciento por igual entre todos los partidos y 50 por ciento restante en forma proporcional. Tampoco se dice que en Chile la ley establece que para las elecciones conjuntas de Presidente de la República y de diputados y senadores, los canales de televisión destinarán gratuitamente 40 minutos diarios a propaganda electoral, que se distribuirán en 20 minutos para la elección de Presidente y 20 para la elección de diputados y senadores.

Ni hablar de aquellos países desarrollados en donde los spots políticos ni siquiera existen. En esos países nadie se rasga las vestiduras por esta reglamentación, y a primera vista no tienen muchas cosas qué envidiar de la democracia mexicana. Llegar a esos niveles implica tener una sociedad más politizada, situación totalmente contraria a la que vivimos. Aquí nos hemos dedicado con singular alegría a despolitizar a la sociedad, y por eso el spot ha sido la única forma eficaz de llegar al gran electorado. Hasta el IFE ha caído en esa tentación (no solamente los actuales consejeros) renunciando a una de las funciones sustantivas que le manda el marco legal: la educación cívica. Lejos de tener un ambicioso programa en esta materia, se limita a difundir spots insulsos, vacíos.

Una sociedad despolitizada es terreno fértil para que las verdades a medias parezcan sentencias bíblicas. Esto explica que algunos pretendan tomarle el pelo a la ciudadanía. Dicen que es monstruoso remover a los consejeros, pero no dicen que en otras ocasiones se ha hecho lo mismo y que los nuevos han salido en hombros. Algunos que dicen esto han sido favorecidos por las remociones y llegado a ocupar los lugares que dejaron, sin drama, quienes fueron removidos. A los ojos de estos intelectuales, es mejor que los consejeros sean el resultado del consenso de dos partidos, como es actualmente, que de los tres principales, como aparentemente sucederá.

En una sociedad despolitizada la clase empresarial, que a su vez es aportante de campañas políticas, se asume con la mayor autoridad moral y se expresa acerca de temas democráticos, de transparencia y rendición de cuentas, sin saber bien a bien con qué se comen, y dando ejemplo, en muchísimos casos, de las peores prácticas en sus empresas y cámaras empresariales. Son los que se quejan de que el Constituyente Permanente les quite los privilegios que les dio unilateralmente, en corto y en lo oscurito, el titular del Ejecutivo (Vicente Fox).

Quienes piden referéndum (que no está en la ley), son los mismos que hace un año argumentaban que no se podía contar voto por voto, por no estar en la legislación. Los que hoy comparan a los partidos políticos (entidades de interés público) con camarillas o mafias; los que denuestan a los senadores, cuestionan las determinaciones de las instituciones democráticas y presionarán a los legisladores locales para no aprobar la reforma: son los mismos que habían venido defendiendo las instituciones. Todo esto es posible por la magia de la televisión.

sábado, 8 de septiembre de 2007

Los Intocables

Vivimos tiempos de polarización. Ya es normal y hasta predecible que cada acción de Gobierno y cada propuesta de reforma al marco legal generen controversia. Lo mismo sucede si se saca al Ejército a la calle que si se pretende remover a los integrantes del consejo general del IFE. Los académicos, analistas e intelectuales se expresan a favor y en contra. Al parecer, el marco legal, las instituciones y el pacto social están agotados y ya no responden a nuestra realidad.

Algunas medidas son ampliamente aprobadas por la ciudadanía y cuentan con esa legitimidad, como las movilizaciones militares; sin embargo, no son pocos los estudiosos del tema que han señalado la debilidad del fundamento jurídico que las sustentan. La ciudadanía sabe que existe un grave problema en materia de seguridad y que las autoridades civiles encargadas de esta área ya no son competentes. Para sostener las movilizaciones y hasta ufanarse de su realización, el Gobierno ha recurrido a la legitimidad que brindan la aprobación ciudadana, la iniciativa privada y los Gobernadores. El mensaje es que el crimen organizado no es intocable, a pesar de que diversas publicaciones dan cuenta de que lo sigue siendo.

Si las movilizaciones son legales o ilegales, poco importa; la Constitución no ha sido intocable, y lo que vale es que tengan el respaldo de los factores reales de poder; quizás son efectivas y con toda seguridad son altamente rentables ante la opinión pública, eso es lo que cuenta. Se dejan de lado las recomendaciones de organismos como la ONU, que sugieren para el caso específico y actual de México sacar a las fuerzas armadas de este combate, y para ello se antepone una razón de Estado.

No cabe duda que los temas de la inseguridad, el crimen organizado y el narcotráfico alcanzan un nivel de gravedad como para unir a los mexicanos en torno a una estrategia (legal o ilegal) que nos permita la esperanza de combatir estos males.

Sin embargo, no sucede lo mismo con otros temas que también son de la mayor importancia. El primer caso es el de la Reforma Fiscal. México apenas recauda el 9 por ciento del PIB, mientras que algunos países sudamericanos rondan el 20 y países de la Unión Europea el 30 por ciento. Esta disparidad explica la calidad de los servicios públicos, la falta de obras de infraestructura necesarias para insertarnos en el siglo 21 y el remedo de aparato estatal con que contamos, entre otras cosas. El tema fiscal es casi intocable, es de lo que se maneja con pinzas.

Pero al parecer esto no es urgente, y es que contrariamente a las acciones militares, que son motivo de orgullo y de las cuales el titular del Ejecutivo asume la honrosa y responsable paternidad, en el caso de las reformas fiscales no hay apoyo de los factores reales de poder, que en el lejano escenario de alcanzar el 20 por ciento de recaudación serían los principales perjudicados en sus intereses privados. Estos sí son intocables.

Por lo tanto, la Reforma Fiscal no brinda el escenario apropiado para el lucimiento; no hay reflectores, no hay aumento de popularidad, no da votos. Esa es la razón de postergar una decisión racional, legal y de Estado, y de no asumir siquiera la paternidad de las propuestas encaminadas a recaudar más. Basta un manotazo en la mesa, de parte de los filántropos, para recular.

Que las necesidades esperen; primero está la imagen, quedar bien con los dueños del país, ganar la siguiente elección y entonces continuar administrando las ruinas del aparato gubernamental.

Es el mismo caso de la Reforma Electoral, donde propuestas van y propuestas vienen. Lo que llama la atención es que el tema de la publicidad gubernamental sea intocable. De nada servirá que los partidos gasten menos o no gasten en medios de comunicación, si no se reduce drásticamente el gasto de publicidad que ejercen principalmente los titulares del Poder Ejecutivo, federal y de los Estados, así como los Presidentes Municipales.

Otro elemento que resultaría afectado, y que hasta ahora se ha beneficiado brutalmente de las campañas y de los partidos que ellos mismos critican, son los medios de comunicación electrónicos, que hasta ahora han sido intocables. Veremos si el Legislativo sigue el ejemplo que dio el Judicial con la Ley Televisa, y se atreve a tocar a esta industria.

Por último, a juicio de "notables" "intelectuales" de este país, los consejeros del IFE también deben ser intocables. Argumentan que si son removidos se vulneraría la autonomía del IFE y luego nos tiran el mismo rollo: que el IFE es la institución más acreditada (¿o menos desacreditada?) del País. No pocos firmantes de este desplegado pertenecen al selecto grupo de los que han sido o son favorecidos de alguna u otra forma por el sistema en el que se han desarrollado.

Habrá que leer con detenimiento el desplegado que este grupo de mexicanos destacados seguramente publicará acerca de los grandes problemas y las macro reformas que le hacen falta a nuestro País; y será de mucha ayuda que nos digan qué es lo que debe ser intocable, cuáles principios deben prevalecer y a favor de qué o de quiénes deben estar. También nos ayudaría mucho saber su punto de vista sobre la vulneración de múltiples principios legales, que se da actualmente en México, en diversos ámbitos. Habrá que esperar que nos iluminen.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 1 de septiembre de 2007

Signos de entendimiento

Contrario a lo que arroja una primera impresión, los hechos ocurridos esta semana no son reflejo de una cerrazón por parte de las principales fuerzas políticas gubernamentales y partidistas. Las dos principales noticias: el formato del Informe y el anuncio de consensos en torno a la reforma electoral, estarían bosquejando un incipiente marco de entendimiento entre el Gobierno y su partido con las demás fuerzas políticas, representadas principalmente por el PRI y el PRD.

El Informe

PRI y PRD mandaron el mensaje: la situación política del País no es de normalidad democrática; el Presidente de la República necesita algo más que los votos de su partido, el respaldo de Elba Esther, el exagerado cobijo de la mayoría de los principales editorialistas, el desmedido apoyo de la televisión, la aceptable aprobación ciudadana que se refleja en las encuestas, la movilización (¿todavía?) de las fuerzas armadas y la ráfaga de lanzamientos mediáticos de nuevos programas gubernamentales virtuales, que solamente existen en el spot institucional.

El escenario del 1 de diciembre de 2006 cambió. El PRD, que a partir del plantón de Reforma fue etiquetado como el villano favorito de la vida democrática, el reventador de instituciones, el partido de la cerrazón y la necedad. Ahora PRI y PRD son aliados para hacer saber, pero sobre todo para hacer sentir a Felipe Calderón y al PAN que deben cambiar su planteamiento y su estrategia.

Ya no fue solamente el PRD el que expresó su oposición al desarrollo de un informe "normal". No fueron pocas las ocasiones en que Manlio Fabio Beltrones sugirió al Presidente una ruta alterna. Estos planteamientos son más profundos de lo que hasta ahora se ha querido analizar. Los agravios se convirtieron en la argamasa que logró unir al PRD y al PRI. Los agravios del PRD son de sobra conocidos; los del PRI quizás consisten en la inexplicable cercanía de la presidencia y del PAN con una enseñoreada Elba Esther; la presidenta vitalicia del SNTE no solamente pone funcionarios de primerísimo nivel y no solamente lo hace en el Poder Ejecutivo, también ha hermanado a su partido con el PAN en contiendas estatales; otro agravio podría encontrarse en la intervención de la PGR (otra vez) en la elección de Baja California.

Si bien el PRI apoyó a Calderón el 1 de diciembre, el apoyo no es a cambio de nada (ahí está el caso de Elba Esther que siempre pasa la factura de sus apoyos) ni tampoco es para siempre; para el tricolor llegó el momento de medir fuerzas, cobrar facturas, y lo hace avanzando sus piezas. Así es la política.

El PRI no pide que el Presidente actúe de una forma distinta a la que lo ha hecho con la maestra; le está poniendo en la mesa al Presidente el planteamiento de que sopese si le alcanza con el apoyo de la líder política-partidista-sindical-magisterial; y como es evidente que no, le pide que por lo menos equilibre, y con base en eso decida con quién quiere gobernar y a cambio de qué lo va a hacer.

El mensaje conjunto del PRI-PRD es que el Gobierno debe sacar sus cuentas y escoger a sus aliados. Si el Presidente no tiene mayoría en las Cámaras y en los Gobiernos locales, debe modificar el planteamiento y la estrategia. Esa es una de las particularidades del régimen democrático que tanto ha sido defendido por Calderón y por el PAN.

Afortunadamente el Presidente decidió bien; le ha quitado presión al ambiente. La prudencia en su actuación lo llevó incluso a cambiar el auditorio por el palacio y 10 mil seguidores por 2 mil invitados. Para resolver un conflicto y superar una crisis, se debe empezar por aceptar su existencia, y es la primera vez, en nueve meses, que el Gobierno y su partido lo hacen.

La Reforma Electoral

El anuncio de consensos por la reforma electoral se ubica en el mismo contexto. Nadie puede decir en su sano juicio que la reforma no es necesaria, y por amplia que sea, quedará rabona en un escenario donde la política se ha convertido en un negocio.

Entre los defensores de los actuales consejeros se encuentran algunos que los condenaron al momento de su designación. Entre sus detractores, hay algunos que trabajaron para ellos. Lo cierto es que no han contado con el consenso del PRD desde su designación y ahora han sumado el repudio del PRI.

Además, varios de los integrantes del Consejo general del IFE llegaron sin tener la más mínima idea de la función que desempeñarían, y otros que sí tenían conocimientos llegaron por ser compadres o íntimos de personajes políticos connotados; uno más llegó portando su credencial de afiliación al PRI.

Los señores consejeros han cometido una interminable lista de yerros, se han conducido con frivolidad y dispendio, no tienen idea de lo que es un organismo constitucional autónomo (el IFE lo es), han sido apaleados por las resoluciones del Tribunal Electoral, y en la completa opacidad han designado como consejeros estatales a personas sin la más remota idea de la materia electoral. Como no les alcanza con su capital, han tenido que vivir del prestigio prestado de anteriores consejeros. Es por eso que se van.

Estos dos acontecimientos podrían ser el preámbulo de un lenguaje de entendimiento que tendrá que construirse y que es necesario para aceptar nuestra diversidad y afrontar nuestros problemas.

rogelio_campos@yahoo.com

sábado, 25 de agosto de 2007

Auditorio Metropolitano

Este proyecto no ha estado exento de críticas, que no se refieren a la no terminación de la obra, como en el caso del Teatro de la Ciudad y de Los Arcos del Milenio, sino al hecho de que la UdeG haya destinado recursos a la construcción de esta obra

La próxima semana abrirá sus puertas al público el Auditorio Metropolitano. Este inmueble y la Nueva Biblioteca Pública de Jalisco Juan José Arreola serán las dos instalaciones emblemáticas del Centro Cultural Universitario (CCU); proyecto de urbanización encabezado por la Universidad de Guadalajara, que pretende convertirse en un distrito cultural que albergue áreas de esparcimiento, comerciales y de vivienda.

En la página de Internet www.centrocultural.org.mx se encuentra la información del CCU, proyecto iniciado en 2001 y que planea un Conjunto de Artes Escénicas compuesto por una sala de conciertos, música y ballet; un teatro de las artes, un teatro estudio, una sala de música de cámara y una plaza de espectáculos al aire libre, además de un museo de ciencias ambientales.

De estas obras proyectadas, la biblioteca se encuentra aún en construcción (recordemos que los jaliscienses no contamos actualmente con un edificio que albergue la biblioteca pública central) y con recursos asignados para su terminación, y el Auditorio Metropolitano habrá de estar listo el lunes próximo para los ensayos de su gala inaugural.

La obra es resultado del trabajo de reconocidos profesionales en arquitectura, asesoría teatral y acústica; impresionante por fuera y deslumbrante en su interior. Tiene una capacidad máxima similar al Auditorio Nacional, con la ventaja de ofrecer 16 configuraciones de aforo, desde 2 mil 700 hasta poco más de 10 mil espectadores. Adicionalmente, cuenta con la ventaja de poder ofrecer hasta tres espectáculos diferentes el mismo día, mientras que el Auditorio Nacional solamente puede montar un espectáculo diario. Por si lo anterior fuera poco, ubica al espectador más lejano a 64 metros del escenario, mientras que en el Auditorio Nacional la distancia es de 100 metros.

Según la revista estadounidense "Pollstar", el Auditorio Nacional de México ocupa el número uno en la lista de los mejores escenarios del mundo para ofrecer espectáculos artísticos, superando al Fox Theatre, en Atlanta; el Radio City Music Hall, y el Madison Square Garden, ambos en Nueva York; el Universal Amphitheatre, en Los Angeles; y el Heineken Music Hall, en Amsterdam, Holanda. Los rubros que se califican son seis: venta de boletos, atención, eficiencia, instalaciones, tecnología y la diversidad de su programación. En instalaciones y tecnología, el Auditorio Metropolitano arranca con ventaja; el reto consistirá en tener un buen desempeño en los demás rubros.

Este proyecto no ha estado exento de críticas, que no se refieren a la no terminación de la obra, como en el caso del Teatro de la Ciudad y de Los Arcos del Milenio, sino al hecho de que la Universidad de Guadalajara haya destinado recursos a la construcción de esta obra. Lo que no se dice con claridad es que la Casa de Estudios invirtió sólo una tercera parte del costo, ya que el resto fue aportado por el Gobierno del Estado y el Ayuntamiento de Zapopan.

Tampoco se contextualiza el hecho de que histórica y recientemente algunas universidades del País han emprendido proyectos similares, esos sí con costo total para esas casas de estudios. Otro elemento que deja de aportarse en la contextualización es el costo que este tipo de inmuebles tiene en otras partes de México y del mundo; si se recurre a estos datos, se aprecia con claridad el costo razonable de una obra con estas características.

En las críticas tampoco se menciona el hecho de que este inmueble es una de las pocas obras ya terminadas que serán sede de los Juegos Panamericanos de 2011. En el sitio de Internet www.guadalajara2011.org.mx se anuncia que en este recinto tendrán lugar las justas de baloncesto.

Un proyecto de estas características no puede estar exento de críticas y señalamientos, independientemente de estar de acuerdo con las obras que se realizan. Lo que llama la atención es que estamos frente a obras terminadas, de alta calidad, y que el proyecto no se quedó en ocurrencia, idea o plan, sino que pasó a los hechos; que unió voluntades, esfuerzos, recursos, y además sigue avanzando, con la construcción de la biblioteca. Los estudios de caso de este proyecto seguramente recogerán las críticas y señalamientos, pero también la fórmula que permitió su realización.

rogelio_campos@yahoo.com