viernes, 19 de agosto de 2011

Gato por liebre

Faltan cincuenta y seis días para la inauguración de los Juegos Panamericanos. Hace trece años los promotores buscaban afanosamente que Guadalajara fuera la sede, y para convencernos de las bondades de recibir los juegos prometieron mucho... y cumplieron poco.

Se les hizo fácil ofrecer. MURAL publicó (3 diciembre 1998): "Más allá de los Panamericanos. Carlos Andrade Garín decía que el cambio sería total, en lo deportivo y en muchas otras cosas". Se construirían nuevas autopistas, se ampliarían y extenderían las avenidas existentes, se trazarían nuevas calles, se ampliaría y extendería la red subterránea de transporte.

Ahí no paraba el optimismo: se remodelarían y renovarían las redes de trenes urbanos, se crearían nuevos estacionamientos, se mejorarían los espacios públicos verdes, se modernizarían los sistemas de señalización y se implementaría tecnología avanzada en el control de tránsito. Poco, por no decir nada, se cumplió de lo que entonces se ofrecía enarbolando la noble causa deportiva.

Los promotores no solamente crearon altas expectativas para que los juegos contaran con respaldo de la ciudadanía; también engañaron -o se equivocaron- con el costo que tendría su organización. En un principio se manejó un costo mucho más bajo del que finalmente será.

En 2006 se dijo que los juegos tendrían un presupuesto de 180 millones de dólares (MURAL, 31 mayo 2006). En 2007, según nota de la Agencia EFE, publicada por ESPN Deportes, se hablaba de 280 millones de dólares http://espndeportes.espn.go.com/news/story?id=565498&s=pan&type=story.

Pareciera que el presupuesto se contagió del espíritu panamericano y empezó una carrera de velocidad o una competencia de salto de altura, ya que el pasado martes, Milenio publicó que el costo de los juegos podría ascender a 750 millones de dólares, según declaraciones de Andrade Garín. Los promotores de los juegos erraron en sus cálculos y estimaciones, pues la cantidad inicialmente considerada se incrementó -nada más- 600 por ciento.

Este aumento presupuestal se ve reflejado en un botón de muestra: la Villa Panamericana. En 2006 nos decían que el inmueble que albergará a los deportistas tendría un costo de 80 millones de dólares. El costo final será de 180 millones de dólares.

En febrero de 2008, el Gobierno del Estado publicó el "Programa Especial Juegos Panamericanos". Ahí se considera una inversión en instalaciones deportivas por 2 mil 142 millones de pesos, que se ejercerían de 2008 a 2009. Según declaraciones de Andrade Garín se invertirán 3 mil 600 millones. Una diferencia de mil 500 millones.

El documento oficial -puede consultarse en http://seplan.app.jalisco.gob.mx/files2/Programas/22%20Juegos%20Panamericanos.pdf-menciona una inversión por 8 mil millones de pesos para renovación urbana. Habrá que ver en cuáles obras se aplicó semejante cantidad o si solamente quedó en un buen deseo.

Esta danza de los millones -de dólares- tiene otros rasgos muy peculiares: la opacidad y la discrecionalidad. A diferencia de Canadá, que organizará los juegos en 2015, los organizadores de Guadalajara 2011 no transparentan sus gastos y en muchos casos no licitan las obras y adquisiciones que realizan (MURAL, 18 de marzo 2011).

A la fecha no contamos con información certera y detallada del costo total de los juegos. La información publicada por el Gobierno del Estado y el Copag en muchos casos es confusa, vaga y contiene duplicidad de conceptos de gasto.

Tampoco sabemos el monto que se recuperará, cuándo y a qué cuenta ingresan los recursos ni el destino que se les dará.

Es el mismo caso de la inversión privada. En 1998 se decía que una parte de lo invertido se recuperaría con aportaciones de la iniciativa privada (MURAL, 3 diciembre 1998). A la fecha no hay datos sobre la inversión privada que se aportó.

Los juegos antes de empezar ya están empañados por el engaño, pésima presupuestación, opacidad, discrecionalidad y ausencia de rendición de cuentas. No hay duda, nos dieron gato por liebre. ¿Así quedará?


rogelio_campos@yahoo.com

twitter @camposrogelio