El Presidente Calderón tiene la convicción de que existen actores con la intención de demoler el ánimo nacional; ayer dijo que "mientras en el mundo hay cosas que se le reconocen a México, aquí se encuentra la manera de que sean mal vistas y arruinadas" (MURAL, 26/05/2011).
No es la primera vez que el Presidente se queja de las noticias publicadas: a su juicio no hay objetividad ni balance. Hace un par de meses, Calderón dijo "si yo no hubiera sido político, a lo mejor me dedico al periodismo... Hubiera hecho un periódico que se llamara 'Balance'. En la primera plana pondría de un lado todas las noticias malas, las más importantes, y del otro todas las noticias buenas, las más importantes, y en medio las notas más objetivas" (MURAL, 17/03/2011).
En esa ocasión, Calderón decía que una nota objetiva era que el Morelia había perdido 1-0 contra los Pumas. Que esa noticia era mala para él, pero que era objetiva, como debió serlo nuevamente la noticia del pasado domingo, en la que los Pumas se coronaron... venciendo nuevamente al Morelia.
Usted juzgue si los siguientes datos son objetivos y en qué parte del imaginario periódico "Balance" merecerían estar.
El Índice de Competitividad del Foro Económico Mundial ubica a México en el lugar 66 de 139. En 2006, cuando inició la actual administración, estábamos en el lugar 58. Perdimos 6 lugares.
El Índice de Estados Fallidos elaborado por Fund for Peace, organización enfocada a temas de seguridad, nos ubica en el lugar 84 de 177 países. Desde 2006 hemos perdido 8 lugares.
El Índice de Corrupción que publica Transparencia Internacional ubica actualmente a México en el lugar 98 de 178 países. En 2006 estábamos en el lugar 70, lo cual significa que hemos perdido 28 lugares.
El Índice de Paz, elaborado por Institute for Economics and Peace, recientemente ubicó a México en el lugar 121 de 153 países estudiados. En 2007 estábamos en el lugar 79... retrocedimos 42 lugares en lo que va de esta administración.
El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo mide el desarrollo humano, y México se encuentra en el lugar 56. En 2006 estaba en el lugar 53. También la ONU ha construido -desde 2003- una tabla que ubica a los países según su grado de desarrollo en gobierno electrónico (e-government). México se ubica en la posición 56. En 2003 ocupábamos el lugar 30, y hemos perdido 26 posiciones en 7 años.
Según la Comisión Económica para América Latina de la ONU, México es el país que menos recauda -con relación al PIB- de todos los países del Continente Americano, incluso por debajo de Haití.
Para el Presidente Calderón "mientras en el mundo hay cosas que se le reconocen a México, aquí se encuentra la manera de que sean mal vistas y arruinadas". La realidad es que los resultados mencionados reflejan que en el mundo se reconoce que México está mal y que viene en picada en diversos y muy importantes aspectos.
Según el Presidente Calderón "existen actores que tienen la intención de demoler el ánimo nacional". Hay que preguntarnos si los académicos y científicos que elaboran estos estudios, y que radican en otros países, tienen algún interés particular por demoler nuestro ánimo nacional, o si sus estudios son objetivos y solamente muestran la realidad.
Si todos esos organismos internacionales, organizaciones sin ánimo de lucro y grupos interdisciplinarios de expertos, tienen interés por elaborar metodologías que invariablemente muestran que nuestro país no es el que ven y el que quieren que veamos nuestro Presidente y su gabinete, entonces urge encontrar esa razón.
Pero si no la localizamos, entonces es importante asumir tales datos como noticias objetivas, al igual que se toma un resultado de futbol, aunque sean malas noticias, en este caso para todos nosotros. Los informes objetivos, como los resultados de futbol, no se discuten, tampoco se cambian con reproches ni con arengas. Los resultados ahí están aunque algunos no quieran verlos, no quieran referirse a ellos o quisieran que no existieran.
En el periódico "Balance", estos resultados irían en dos terceras partes de la portada: en la parte de en medio... y también en la de malas noticias. Difícilmente las buenas noticias son tantas y tan impactantes para lograr un balance.
rogelio_campos@yahoo.com