Al finalizar una jornada futbolera, algunos medios suelen elegir El Gol, El Error, La Figura y El Oso. En esta semana, bien podríamos hacer lo mismo en política.
El primer nominado para el gol de la semana sería Trino Padilla. Muchos dudaban que entraría a la Cámara de Diputados, por el lugar que tenía en la lista plurinominal. Entró, y lo hizo por la puerta grande, ganó de manera contundente en un Distrito eminentemente panista. Su rentabilidad como candidato está fuera de toda duda.
El segundo nominado de la semana sería el Centro de Estudios Estratégicos para el Desarrollo (CEED) de la UdeG. Desde finales del año pasado, el Centro asumió las funciones de efectuar encuestas. El domingo realizó una encuesta de salida en Guadalajara y Zapopan, que se dio a conocer al público a las ocho de la noche de ese día, y resultó por demás certera respecto al resultado electoral definitivo en ambos Municipios.
Para el error hay varios nominados. Los emilistas dicen que Eduardo Rosales, y los de enfrente dicen que el ganador de esta "distinción" es Emilio. Los emilistas señalan que Rosales se equivocó en eso de la guerra sucia. Resulta curioso, pues dicen que según ellos, el PAN no estaba haciendo guerra sucia -ni siquiera la conocían-. Los emilistas tienen muy mala memoria, porque fue gracias a esta estrategia que Calderón y el propio Emilio están en el poder.
Otros nominados al error de la semana serían prácticamente todas las casas encuestadoras -con excepciones de las realizadas por MURAL-, que no atinaron: algunas sacaron un tirititito, otras un tornillo y otras de plano se metieron autogol, porque de aquí en adelante nadie les va a creer. No obstante lo anterior, destacados editorialistas sí anticiparon que los disparos de estas encuestadoras iban a gol.
La figura de la semana es Aristóteles Sandoval, sobre quien centraron el fuego los panistas, pero resistió y recuperó lo que los priistas tenían perdido desde 1995.
Como nominados para "El Oso de la Semana" hay varios. El Gobernador de Jalisco, quien dice que él no opina de cuestiones partidistas: lo dice aquí en "provincia", tratando de burlar a los periodistas jalisquillos... y al día siguiente aparece muy orondo en el DF en un acto partidista y manifiesta su apoyo al presidente saliente y perdedor de su partido. ¿Habrá cobrado ese día el Gobernador, o pidió licencia para acudir a un acto partidista?
Y "El Oso" sigue: mientras Emilio manifiesta su apoyo a Germán, aquí sus huestes quieren que Rosales renuncie. Uno de los manifestantes declara a MURAL: "yo ni panista soy", y dice que trabaja en una empresa de transporte urbano (¿algo que ver con Monraz?)... espectáculo bochornoso que, según la honestidad panista, más bien sería digno del PRI (el acarreo, los transportistas) o del PRD (el plantón, el cierre de calles).
Instituto de Transparencia
En la semana hubo algo más que resultados electorales, porque el ITEI volvió a generar reacciones. Pablo Lemus desconoció las decisiones del Legislativo y pide que se reponga el procedimiento. Muy interesada la Coparmex en el asunto de la transparencia (y de la democracia, pero en los bueyes de sus compadres)... aunque surgen algunas dudas.
Si están tan interesados en la transparencia, no se explica su laxitud cuando se trata de apoyar decisiones del Gobernador. Lemus dio todo su apoyo al macroendeudamiento que solicitó González Márquez, y no se ha visto que pida cuentas del ejercicio de estos recursos (miles de millones de pesos). Tampoco se escucha la voz de Lemus cuando los medios han documentado que diversas autoridades burlan -como práctica común- las licitaciones y están asignando las obras de manera directa.
Hace poco MURAL documentó que el Ejecutivo había sacado de Internet la consulta de cheques por un tiempo considerable. Uno de los "responsables" de transparencia de Casa Jalisco argumentó que "estaban poniendo candados para los hackers". Ahora resulta que los que antes clamaban por la transparencia son los "candaderos" que impiden que quienes ejercen el periodismo puedan consultar información pública. En ese entonces Lemus calló.
Otro que se sumó al tema fue Javier Gutiérrez Treviño. Resulta que ve la elección del ITEI muy poco transparente. Lo raro: es el mismo que veía el agua del Río Santiago pura y cristalina.
Decíamos que es difícil saber si Emilio cobró el día hábil de la semana que acudió a un acto partidista, o si pagó con sus recursos el avión y otros gastos. Lo raro es que no nos lo diga el titular de Comunicación Social de Emilio. Todavía resulta más extraño que este funcionario sea quien niegue que el Gobernador se esté metiendo en cuestiones partidistas cuando todos vemos lo contrario. Es raro, porque fue consejero del ITEI, de esos que Lemus y los grupos que hoy hacen tanto ruido no cuestionaron.