sábado, 9 de febrero de 2008

Poco apoyo

El portal de mural.com publicó ayer "Falta apoyo a empresarios". La nota reporta ésta y otras declaraciones del presidente de Grupo Televisa, Emilio Azcárraga Jean. El influyente hombre de negocios expuso que en México no se respalda a las empresas nacionales, mientras que en la Unión Americana y en España sí lo hacen. Sería muy interesante escuchar y leer las reacciones al respecto, de quienes en los medios de comunicación se han empeñado en exorcizar el demonio del populismo y han abrazado el noble oficio del culto al mercado.

Las declaraciones del empresario de la televisión nos permiten abordar varios temas. Quizás el menos serio de todos sea el hecho de que Emilio González puede asumirse como alguien que sí apoya a las empresas nacionales. Azcárraga no puede reprochar esa falta de apoyo a las autoridades jaliscienses. Que excluya a Jalisco de las autoridades que no apoyan.

También nos permite abordar el tema de los "rescates": el bancario y el carretero. Los empresarios de estos ámbitos tampoco se pueden quejar de que no han sido apoyados por el Gobierno. Han sido apoyados al grado de que una vez que algunos de ellos han quebrado sus negocios, se les ha "rescatado" y se les han adjudicado de nueva cuenta concesiones en las que habían fracasado anteriormente. En estos casos, no solamente hay apoyo, sino que hay cariño. Que Azcárraga excluya a los banqueros y carreteros del sector de no apoyados.

Ahora abordemos el tema de los apoyos que se proporcionan por parte del Gobierno y que son tan cacareados en los medios de comunicación, incluyendo los que son propiedad de Azcárraga. ¿Quiere decir que los programas de la Secretaría de Economía, Bancomext, etcétera, no funcionan, o no los está considerando Azcárraga?... ¿O quiere decir que se requiere de más apoyo del que se proporciona?

Hay otras excepciones que debemos ponderar. La de los empresarios que han sido invitados a colaborar en cargos públicos: llegaron para enseñar la forma correcta de administrar, eliminar la corrupción y dar resultados. Hay decenas que han sido invitados a cargos en diversos ámbitos de Gobierno. Prácticamente ninguno ha destacado por lograr los objetivos ofrecidos. Lo que sí ha ocurrido es que al paso de los años se encariñaron tanto con la función pública que abandonaron sus negocios, dejaron de ser empresarios y pasaron a ser burócratas de altos vuelos. A estos empresarios sí se les apoyó: se les proporcionó un sueldo alto y varias prestaciones, inclusive algunas que no existían en el sector público y que fueron importadas por ellos, como los bonos, seguros dotales, etcétera.

Azcárraga acusó que mientras en México ha habido varios Presidentes y políticos que se han robado muchísimo dinero, a las empresas no se les apoya. Sería interesante que en los medios de Azcárraga se ventilara con detalle los montos de lo robado y los nombres de los rateros. También amerita que se ventile el nombre de los empresarios que han propiciado el enriquecimiento de los Presidentes y políticos. Estos empresarios seguramente han sido obligados, por la falta de apoyo gubernamental, a corromper o participar en la corrupción de los políticos y así poder obtener los apoyos que el Gobierno no proporciona de manera institucional. Así habrían logrado muchos apoyos que se han traducido en jugosos negocios.

Así como seguramente hay empresarios que no son apoyados, también hay algunos a quienes se apoya de más. El caso de la construcción de torres en Guadalajara y Puerto Vallarta es por demás contundente. La autoridad les hace planes parciales a modo. Si no se puede edificar más de 10 pisos... muy sencillo, ¡cambien el plan! ¿No que no hay apoyo?

Azcárraga dijo que en Estados Unidos y España se apoya a las empresas nacionales y que en México no sucede así. Tiene razón. De hecho, es lo que pelea el sector más desfavorecido de campesinos frente al TLCAN. Esas reacciones propiciaron que no pocos académicos e intelectuales se pusieran muy mal y la emprendieran contra esa bola de retrógrados. A ver si ahora hacen lo mismo con Azcárraga.

Azcárraga dijo: "Ahí vemos cómo los americanos y su Gobierno defienden a las empresas americanas, lo mismo en España. Y en México lo que se dice es que no hay que apoyar a las empresas mexicanas, en todos los rubros, no sólo en televisión". Tiene razón en eso de la falta de apoyo. Pero tampoco se apoya al transporte público, las prestaciones sociales, la difusión de cuestiones culturales, el cuidado a la ecología y una larga lista de temas que no son atendidos en México como sí se hace en la Unión Americana y en España.

Le faltó decir a Azcárraga que la falta de apoyo no se manifiesta sólo en los empresarios existentes, sino en los potenciales. México tiene una penetración crediticia del 15 por ciento con relación al PIB. Chile 40, Brasil 50, Tailandia 100 y China 150 por ciento. Sin financiamiento no hay nuevos empresarios y sin nuevos empresarios no hay competencia que beneficie al consumidor.

Hablando de Azcárraga, fue imposible no recordar las concesiones de centros de apuestas que le otorgó Creel. Hablando de apuestas, apuesto a que los adoradores del libre mercado, a pesar de tener en las declaraciones de Azcárraga una oportunidad de pronunciarse con la fiereza con la cual arremeten contra los grupos que defienden los temas que tampoco son apoyados en México... finalmente, con él no lo harán.


rogelio_campos@yahoo.com