Hoy es el primer día de un nuevo año, pero además de una nueva década. El año nuevo nos inyecta una dosis de renovación: los buenos propósitos nos invaden. El reto es no dejarnos vencer por los enemigos de esos ánimos renovadores.
Hay varios referentes de lo que debemos evitar, a riesgo de fracasar en nuestro intento transformador. No debemos hacer trampa en la medición de metas; al hacerlo estaríamos engañándonos. Por ejemplo, no debemos incurrir en el burdo proceder de nuestras autoridades, que miden la tasa de desempleo muy a su manera. En México no cuentan como desempleados quienes se ocuparon una hora en la última semana o estuvieron buscando trabajo. Esta maniobra ubica a México con una tasa de desempleo menor a la de países desarrollados o en crecimiento. No debemos engañarnos con sus mediciones y metas, a riesgo de que queramos hacer el ridículo.
Debemos identificar nuestro principal problema y ahí enfocar las baterías. Si se tiene 20 kilos de sobrepeso y el propósito de año nuevo es correr cinco kilómetros diarios, lo más seguro es que no se logre la meta. También es muy probable que el problema de sobrepeso continúe y que posiblemente se lesionen las rodillas. Todo esto puede pasar por un mal diagnóstico: querer bajar muchos kilos de peso solamente con ejercicio. Primero debe resolverse el problema de sobrepeso y después abordar la condición física.
Es algo parecido a lo que le sucedió al Presidente Calderón. Falló en su diagnóstico y centró todas sus baterías en el problema del narco. Tres años después, tenemos 15 mil ejecutados, niveles de violencia nunca antes vistos... y el narcotráfico continúa igual. Mientras se libra esta guerra, nuestro país desciende -año con año- en prácticamente todas las mediciones internacionales sobre temas trascendentes: ingreso per cápita, libertad económica, competitividad, corrupción, transparencia, pobreza, gobernabilidad, Estado de derecho, ingresos tributarios, transparencia presupuestal, equidad, derechos humanos... y la lista continúa. No nos equivoquemos al identificar el principal problema a resolver o hábito a erradicar, tampoco en el diagnóstico o estrategia a seguir.
En el transcurso del año, no debemos confiarnos en los temas que hasta ahora no han representado problema. Debemos estar atentos a lo que surja. No vaya a pasarnos como al Gobernador de Jalisco que, con motivo de la Cumbre entre Calderón, Harper y Obama, alardeó de que Guadalajara fue elegida como sede por su seguridad. En fechas navideñas Emilio recibió su regalo: según la PGR, Jalisco ocupó en 2009 el segundo lugar nacional en la comisión de delitos federales, y el 75.08 por ciento de los delitos realizados en Jalisco, tienen que ver con el narcotráfico. Si nos creemos que vamos bien en algunos rubros, podemos estar tremendamente equivocados.
El tema económico es importante para todos. Si nos vamos a endeudar, debemos ser cautos en el destino que le demos a esos recursos. Si nada más nos endeudamos porque nos ofrecen créditos, después no vamos a saber cuántos créditos tenemos, cuánto debemos ni a dónde fue a parar lo que pedimos. Es lo que le pasó al Gobernador este año: nadie sabe cuánto de lo autorizado para deuda se contrató, a quién se le debe, cuánto se ha gastado... y lo peor es que no se ve en qué se invirtió.
En el ánimo renovador, no debemos dejarnos llevar por la emoción de soñar, es mejor tener objetivos y metas. Los sueños son efímeros. Peor aún puede resultar la mezcla de sueños y gasto: gastar soñando o soñar gastando. Es lo que le pasó al mismo Gobernador, que a mediados de 2008 decía que tenía "grandes sueños" y para lograrlos constituyó el "Consejo de Fomento a Grandes Eventos" y le asignó 100 millones de pesos. No se sabe si los 30 millones gastados este año por ese consejo son adicionales a los 100 entregados en 2008. Tampoco se sabe el estado que guardan los trabajos y proyectos de este consejo que tiene la encomienda de atender los sueños del Gobernador.
Todos debemos encontrar la mejor forma de hacer posibles nuestros nuevos y buenos propósitos, pero aquí tenemos una colección de lo que no debemos hacer. Espero nos sirva. Que este sea el primer día de una década llena de logros para usted.
rogelio_campos@yahoo.com
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